Es conocido en todo el mundo y en cada lugar tiene su propio título. Ltitle black dress, petite robe noir, mini vestido negro. Se encuentra, de una forma u otra, en todos los armarios femeninos y es por su versatilidad una prenda que ha sobrevivido al paso del tiempo y la evolución de las tendencias.
El Little black dress nace como la versión modernizada del vestido de luto, que tiene su origen en la época victoriana. La prenda la lució durante 40 años la Reina Victoria tras perder a su marido, el príncipe Alberto.
Sin embargo, su origen tal y como se conoce actualmente esta prenda se atribuye a Coco Chanel. La célebre modista lo subió por primera vez en la pasarela en los años 20, en un desfile en el que buscaba protestar por las normas sociales de la época, las cuales no permitían a las mujeres lucir el color negro, reservado para el luto.
La diseñadora fue más allá y no solo tiñó el vestido en el ‘color prohibido’ también lo acortó por encima de las rodillas en un nuevo gesto reivindicativo sobre la liberación de la mujer en cuanto a los restrictivos códigos de vestimenta.
A lo largo de los años el Little black dress ha sufrido varias modificaciones en un ejercicio de libertad creativa por parte de diferentes diseñadores como Christian Dior, que lo utilizó para dar vida al popular New look en los años 50 o Hubert de Givenchy, quien casi dos décadas más tarde del nacimiento de la prenda lo adaptó para la gran pantalla, en concreto, para Audrey Hepburn en su papel de Holly Golightly en Desayuno con diamantes.
En los años 90, el vestido tuvo de nuevo un resurgir gracias a Diana y al look que escogió para reivindicar, como lo hizo Chanel, su libertad en la elección de vestuario. Fue en la fiesta de Vanity Fair de 1994. Tras conocerse el romance del príncipe Carlos con Camilla Parker, Lady Di escogió un diseño negro de Christina Stambolian con los hombros descubiertos y por encima de la rodilla que más tarde fue bautizado como “el vestido de la venganza de Lady DI”.
En la actualidad la popular pieza se lleva en todo tipo de eventos, tanto formales como informales. Vinculado, sea cual sea su patrón, tejido y medida, a la elegancia y la atemporalidad, el mini vestido negro es además un símbolo feminista.