Anthony Mackie: “Que el Capitán América sea negro significa que ha habido un gran giro”
Cine
El actor toma el relevo de Chris Evans con 'Capitán América: Brave New World' junto a Danny Ramírez y Harrison Ford
Anthony Mackie y Danny Ramírez durante la presentación de 'Capitán América: Brave New World' en Madrid
El Capitán América, por definición, es el superhéroe más político del universo Marvel. En la portada de su primer número, de 1940, en plena Segunda Guerra Mundial, el enmascarado azul propina un puñetazo en la cara a un Hitler rodeado de cruces gamadas y planos para sabotear los Estados Unidos. Con el tiempo, el superhéroe prestaría una larga lista de servicios a cada presidente. Roosevelt le entregará el escudo. Y deberá vencer a las fuerzas del letal Víbora que ha convertido a Ronald Reagan en soldado reptiliano... El Capitán América ha simbolizado el mejor idealismo del país y sus gentes. Por supuesto, en el primer cómic era rubio. Como el último actor que lo encarnó en el cine, Chris Evans. Ya no. El día 14 llega a las grandes pantallas Capitán América: Brave New World. Y el nuevo Capitán América, en un giro cargado de simbolismo, es negro, encarnado por Anthony Mackie (Nueva Orleans, 1978).
Anthony Mackie como Sam Wilson, el nuevo Capitán América
“Creo -explica el actor en una entrevista en Madrid- que este cambio dice mucho sobre los tiempos en los que vivimos, la idea de que yo sea negro y encarne al Capitán América y no sea una cuestión. Creo que definitivamente significa que ha habido un gran cambio, un gran giro“. ”Y estoy emocionado por ver lo que la próxima generación hace con el poder que ha desarrollado. Creo que los jóvenes de ahora ven el mundo de manera muy diferente. Son prometedores. La luna no está tan lejos para ellos como cuando yo era un niño. Es interesante ver cómo han cambiado tanto con la tecnología, la educación, la experiencia y la evolución”, subraya Mackie.
Un actor conocido por películas como The Hurt Locker y que llevaba años dando vida en el universo cinematográfico Marvel a Sam Wilson, el superhéroe Falcon, el primer superhéroe afroamericano de Marvel, creado en plena lucha por los derechos civiles en los sesenta. Un Sam Wilson que en los cómics de papel tomó el relevo del tradicional Capitán América, Steve Rogers, que se jubilaba, en 2015, en plena presidencia de Barack Obama. Y una década más tarde, con un mundo diferente a su alrededor, ese cambio ha llegado al cine y Mackie enarbola el escudo tricolor de vibranium del Capitán América.
Takehiro Hira, que da vida al primer ministro nipón, Anthony Mackie y Harrison Ford como el presidente Thaddeus Ross en 'Capitán América: Brave New World'
Sobre si el Capitán América, como otras veces en su historia, trabajaría con el nuevo presidente estadounidense, Donald Trump, Mackie reflexiona que “trabajaría con cualquiera, creo que es el poder y el prestigio de ser el Capitán. No se trata tanto de juzgarte por tus faltas o intentar cambiar tu idea o la forma en que ves el mundo. Se trata más bien de aceptar tus puntos de vista y ver cómo podríamos trabajar juntos. Creo que por eso tanta gente puede identificarse con él y apreciarlo. Es humanitario. Digno. Un buen ser humano”.
Por ahora, el presidente que le ha tocado en Capitán América: Brave New World, dirigida por Julius Onah (The Cloverfield Paradox), es... Harrison Ford, en una película repleta de acción con atentado presidencial incluido, conspiraciones globales e, incluso, Harrison Ford transformado en un Hulk... de color rojo. Un mundo en el que, afirma uno de los personajes, “el país se siente perdido y la gente necesita esperanza”.
El presidente Thaddeus Ross, encarnado por Harrison Ford, como un Hulk rojo en 'Capitán América: Brave New World'
“Creo que es una frase que no solo va bien para este momento, todos en algún momento nos hemos sentido así. Es una constante, algo que todos hemos experimentado. Recuerdo cuando era niño, encendieron la televisión porque se lanzaba el transbordador espacial Challenger. Y había una mujer que era maestra y estaba en él. Los cohetes impulsores para el Challenger se fabricaron en New Orleans. Así que fue un gran acontecimiento y todos salimos y vimos el camión con los cohetes que se trasladaban a Florida. Cuando despegó y explotó, sacudió a toda la ciudad y a todo el país. Y esa sola mujer cambió la cara del mundo, porque perdió su vida. Yo ahí me sentí perdido, roto. Así que no creo que sea algo que tenga que ver con la actualidad, sino con la idea individual de vivir en la realidad y en la sociedad”.
Y asegura que le emociona presentar este personaje a una nueva generación de espectadores. “Cuando era niño, me encantaba ver a Lou Ferrigno como El increíble Hulk porque no podía imaginarme a un ser humano tan grande. No había efectos especiales ni gráficos, era solo él. Estoy muy emocionado con la idea porque la generación de ahora es muy diferente, mis hijos ven el mundo de una manera completamente diferente”.
Falcon (Danny Ramirez) y el Capitán América (Anthony Mackie) en el filme
Codo con codo con Mackie en el filme -como lo estuvieron previamente en la serie de Disney The Falcon and the Winter Soldier- está Danny Ramírez (Chicago, 1992), que toma el relevo como Falcon. Un actor de origen latino conocido por filmes como Top Gun: Maverick o Stars at noon y que reflexiona sobre la importancia de que Mackie o él encarnen ahora a populares superhéroes. “Para mí es muy importante porque cuando era niño nunca veía personas en el cine que me dieran esperanza de poder hacer algo especial. Solo deportistas. Tener la ilusión de ser alguien que puede impactar al mundo. También de una forma artística. Entonces creo que el impacto positivo que va a dar es que muchas personas, muchos niños, van a poder verse ahora en nuestros zapatos, saber que sí se puede”.
“El cambio en los superhéroes creo que pone una luz muy brillante sobre los errores sistémicos que existían en el país”, dice Danny Ramírez
Un cambio que, dice, “socialmente creo que pone una luz muy brillante sobre los errores sistémicos que existían en el país, en la falta de representación de las dos culturas. Creo que esto nos da un poquito más de espacio para que podamos seguir contando historias así”.
Y recuerda que aunque los cómics ya estaban escritos hace tiempo “obviamente hay similitudes y paralelismos, y los que a mí me gusta conectar es que en este momento necesitamos personas de la comunidad, líderes que puedan impactar a nivel social de la comunidad con positividad y con esperanza, porque en estos momentos obviamente no estamos muy llenos de esperanza con lo que está pasando. Esta película me da fe de que alguien en la vida real tome esa misma posición de poder ser líder y tener un impacto positivo”, concluye.