A Inma Rubiales nunca le gustó ir al conservatorio. “Me saltaba las clases y me iba a la biblioteca a pasar la tarde, que estaba al lado”. Allí descubrió un mundo que la atrapó y que a día de hoy es su vida: la literatura. “Pedía prestado un libro, lo leía y a la noche, antes de marcharme, lo devolvía y me iba a casa con otro nuevo”. Con el tiempo, pese a tener solo ocho años, decidió escribir el suyo propio en su libreta de pentagramas. “Se lo regalé a la bibliotecaria por si alguien quería leerlo”.
No le hizo demasiado caso pero, ahora sí, el centro está repleto de obras suyas. Y es que, Rubiales se ha convertido en una de las autoras de literatura juvenil y young adult más leídas de España. Este fin de semana será una de las cabezas de cartel del Crush Festival, un nuevo evento literario que nace en Barcelona y que tiene como objetivo reunir a los lectores más jóvenes en la Universitat de Barcelona, en la Gran Vía de les Corts Catalanes, este fin de semana.
Young adult , o YA, se traduce como ‘jóvenes adultos’, es decir, lectores a partir de 14 años para arriba, pues también es muy popular entre adultos. Los protagonistas son, por norma general, adolescentes, y las historias acostumbran a ser románticas, fantásticas o, a veces incluso, distopías juveniles. Tomás Casals, director de Bookish y principal impulsor de este acontecimiento, explica a La Vanguardia que existía un vacío en España en lo que acontecimientos literarios de gran formato para este público se refiere. “No podemos ignorar esta literatura y a estos lectores, porque suponen un segmento importantísimo dentro del sector del libro y el crecimiento, impulsado por las redes sociales, es brutal”.
Inma Rubiales, Karen M. McManus, Rebeca Stones o Mercedes Ron son algunas de las autoras invitadas
Instagram, YouTube y TikTok son las redes que más promocionan las lecturas entre jóvenes. Esta última creció exponencialmente tras la pandemia cuando, durante el confinamiento, muchas personas recurrieron a nuevas formas de entretenimiento. El sector editorial empezó a sacar rédito de ello después de que surgiese de forma natural BookTok, la tendencia de recomendar libros que arrasa en la red, y los booktokers , quienes la practican. “Las redes han creado un modelo de vínculo más personal entre autor y lector diferente a lo que estábamos acostumbrados hasta ahora”.
Son muchos los que a través de estas plataformas ya adelantan a sus seguidores el nuevo festival que está a punto de nacer en la ciudad. “No es casualidad que sea en Barcelona, una ciudad que hace ya muchos años que se ha convertido en una capital editorial y del libro, no solo por Sant Jordi, sino por todo lo que se cuece aquí. Faltaba algo grande para este público”, reivindica Casals, que establece unas edades aproximadas de entre 15 y 30 años, lo que coincide con el tramo con mayor población lectora en España, según el Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros en España 2023, que publicó en enero el Ministerio de Cultura.
“Merecen tener un Primavera Sound de la literatura. De hecho, el evento está pensado para que así sea”. Las actividades lo demuestran, pues van desde una gran fiesta literaria con música y autores en la Estació de França “para la que se han agotado todas las entradas”, hasta quedadas de intercambios de libros, de cosplay , talleres de podcasts y de personalización de libros o matchs literarios, para que puedas emparejarte (no en términos románticos, necesariamente) con alguien con gustos lectores similares.
Cerca de cincuenta autores nacionales e internacionales, como Adalyn Grace, Rebeca Stones, Mercedes Ron o la propia Inma Rubiales, acudirán a esta cita, que tiene voluntad de ser anual. “Esto no va a parar de crecer y esperamos que en los próximos años sean más los festivales de young adult que crezcan en nuestro país y en Europa. Tampoco descartamos, si va bien esta primera edición, plantear otras en diferentes ciudades”, auguran los organizadores, que adelantan que ya se han vendido más de 2.000 entradas y que están rozando el sold out .
Otro de los puntos fuertes del acontecimiento son los talleres de pitching para que nuevos autores puedan presentar sus obras a las editoriales. Al final, señala Laia Zamarrón, editora de Karen M. McManus –otra invitada estrella del fin de semana– “los festivales aportan un lugar de encuentro”. Celebra, además, esta nueva iniciativa, pues permitirá “poner en valor la altísima calidad que tiene esta literatura” y que está protagonizada mayoritariamente por mujeres.
Este último punto es algo que reivindica Casals: “Desde la literatura se ha reivindicado estos últimos años el papel de las autoras. Hace no tanto tiempo, muchas se veían obligadas a ponerse seudónimos para publicar. Estamos ante un género y fenómeno literario contrario, en el que son ellas, tanto autoras como lectoras, las que van un paso por delante”. La prueba del algodón son las largas colas que se forman para conocerlas, “de hasta diez horas. Por eso, estoy contenta de que las lectoras empujen para tener su propio espacio. ¡Lo consiguieron!”, concluye Rubiales.