Vox reúne a 200 personas contra el estreno de 'Altsasu', que el público ha aplaudido en pie
La canción Mi querida España , de Cecilia, ha puesto fin este jueves en el teatro de la Abadía al estreno de Altsasu en Madrid y a una noche de emociones intensas. Dos centenares de personas, separadas de la entrada del teatro por un cordón policial, han coreado eslogans como “Consejero, dimisión”, “Contra la ETA, metralleta” y, ya sin rimas y repetidamente, “Pedro Sánchez, hijo de puta” durante una hora. Habían sido convocadas por Vox y las encabezaban Rocío Monasterio y Javier Ortega Smith, que han asegurado que el montaje de la compañía vasca La dramática errante “blanquea el terrorismo”.
Y han pedido la dimisión del responsable de Cultura de la Comunidad de Madrid, el popular Mariano de Paco, por financiar, han dicho, con 1,8 millones un teatro que “permite una obra así”. Un montaje al que el público de la Abadía –una fundación privada sin ánimo de lucro– ha acabado aplaudiendo en pie mientras alguna de las actrices lloraba emocionada.
Una escena de la obra 'Altsasu', de la compañía La dramática errante
La obra aborda la paliza que recibieron dos guardias civiles que estaban con sus novias en un bar de la localidad navarra de Alsasua en 2016. Y los posteriores juicios a los acusados, a los que se llegó a pedir 50 años por terrorismo. Y lo hace sin emitir una opinión, desde el relato, la mirada y el dolor de todos los implicados, mostrando desde las amenazas al bebé de uno de los guardias a los años de espera en la cárcel de los imputados. No en vano nació en un proyecto titulado Cicatrices que pretendía restañar heridas.
Jordi Martí: “Es un despropósito, un ataque injustificable en un Estado democrático”
El secretario de Estado de Cultura, el barcelonés Jordi Martí, ha acudido al estreno, y ras notar lo extraño que resultaba que un policía haya tenido que comprobar las entradas de los asistentes para dejarles pasar, ha señalado que la convocatoria de Vox “es un despropósito, uno más de esta batalla con la que Vox, en algunos casos con la complicidad del PP, está haciendo que algo que parecía desterrado en nuestro país, que es la censura, vuelva”.
Y ha asegurado que acudía a apoyar a todas las expresiones artísticas “que sufren este tipo de ataques injustificables en un Estado democrático”. Ni el Ayuntamiento ni la Comunidad de Madrid, que forman parte del patronato de la Abadía, han estado, y Martí ha remarcado que “hay gente que piensa que la democracia es simplemente votar cada cuatro años, pero tiene un elemento central, que es el espacio de conversación pública, donde caben todas las opiniones y se construye el diálogo democrático. El arte tiene ahí un papel fundamental que es hacerse las preguntas más incómodas. Y la defensa de la libertad artística debería ser el elemento central de cualquier responsable cultural”.
Concentración de Vox con motivo del estreno de la obra de teatro ‘Altsasu’ este jueves en Madrid
El director artístico de la Abadía, el académico de la RAE y dramaturgo Juan Mayorga, ha dado en escena las gracias al público “más que nunca, por estar aquí”. Y ha dicho que “un teatro es un lugar para la paz y la libertad porque quienes acuden a él lo hacen libremente, y libremente eligen mirar y escuchar y juzgar sobre lo que han visto y escuchado, y porque en él se reúnen personas diferentes que acuerdan unir sus ojos y sus oídos en un escenario donde actrices y actores representan posibilidades de eso que llamamos la humanidad”.
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