El Año Tàpies quiere rescatar al artista del olvido y "reconectarlo con la opinión pública"

"A Tàpies le está pasando lo que a toda una generación de artistas europeos de la segunda mitad del siglo XX, lo estamos olvidando. Las únicas excepciones son aquellos que tienen un Estado detrás. Tàpies no lo tiene, pero sí  tiene una ciudad y un país", señala Ferran Rodés, el presidente de la Fundació Tàpies, en la presentación del Año Tàpies, una conmemoración que deberá servir para "reconectarlo con la opinión pública más cercana". La conmemoración arrancará el próximo 13 de diciembre, coincidiendo con los cien años del nacimiento del artista, y la fiesta continuará a lo largo de todo el 2024, con numerosas actividades, entre ellas una gran retrospectiva comisariada por Manuel Borja-Villel y una película de Albert Serra.

Tàpies fue mucho más que un pintor o un artista que experimentó constantemente con los diferentes lenguajes estéticos. Fue también un  escritor y un pensador visionario (un “pequeño filósofo que medita sobre la existencia”, tal como se definía él), que se anticipó a algunos de los temas centrales de la actualidad, como el "ecologismo" o el "anticolonialismo", subraya Rodés, por lo que la efeméride quiere celebrar no solo al artista y su obra sino "reivindicar la vigencia de unas ideas hoy más que nunca necesarias". 

La Fundació del artista, sin director desde la salida de Carles Guerra hace tres años, espera tener resuelto el relevo antes del verano

De ahí el lema del centenario, Tàpies vive. Vive Tàpies,  al que están invitadas a participar 150 instituciones y cuya programación, bajo la coordinación de Judith Barnés,  se articulará en torno a cinco temas:  el proceso creativo del artista, la ciencia en tándem con el arte y como una manera de entender el mundo,  la filosofía oriental y la cultura japonesa, el compromiso del artista, y las nuevas miradas que sobre todo ello pueden ofrecer los jóvenes artísticas.

Los preparativos del Año Tàpies (que cuenta con un logotipo del estudio Todojunto y de momento se conoce un avance) se están llevando a cabo sin que la Fundació haya resuelto el relevo tres años después de la salida de  Carles Guerra. Finalmente se puso en marcha un concurso el pasado 1 de septiembre, pero siete  meses después y pese a haber recibido al menos  una veintena de curículums importante, según Rodés, el proceso de selección se prolongará al menos hasta el verano. 

En todo caso, el pistoletazo de salida tendrá lugar el 13 de diciembre con la inauguración de las exposiciones Tàpies. La huella japonesa, centrada en la influencia en su obra de algunos  monjes japoneses de los siglos XVIII y XIX que transmitían las enseñanzas del budismo zen, y A=A,B=B, que con Tàpies como telón de fondo reflexionará sobre las conexiones entre arte y ciencia mediante la participación de artistas y creadores seleccionados por Pep Vidal (Daniel Bejar, Jorge Carrión, Lúa Coderch, Ian Waelder...)

Ya en primavera del 2024, Sengai   dará a conocer la obra del  monje budista japonés a quien Tàpies admiraba y cita en algunas de sus obras y escritos.  La última exposición, y momento cumbre de la exposición,  será la retrospectiva Antoni Tàpies. La práctica del arte, comisariada por el exdirector de la Fundació y del Museo Reina Sofía, Manuel Borja-Villel, que reseguirá toda su trayectoria,  volviendo a "vincular obras que durante mucho tiempo han estado dispersas" y pondrá el énfasis en las más desconocidas, según la conservadora Núria Homs.

 Esta última muestra recalará primero en el Bozar-Centre for Fine Arts de Bruselas (del 14 de septiembre hasta el 7 de enero), más tarde pasará por el Museo e Reina Sofía de Madrid (del 20 de febrero al 24 de junio), y a partir de julio de 2024 se podrá ver en Barcelona en una "versión pensada exclusivamente para la Fundació", ha explicado Homs.

El centro desplegará un conjunto de actividades educativas, coorganizará exposiciones con otras instituciones, como la que acogerá el Museu d'Història de Catalunya sobre el compromiso político del artistas, y mientras dure la celebración su fachada se iluminará cada noche gracias a una intervención del estudio de Antoni Arola. El encargado de bajar el telón será el cineasta Albert Serra, con el estreno de una película sobre la mística y el materialismo.