El verdadero y preocupante motivo por el que J.K. Rowling utiliza seudónimo
Nuevo libro
La británica ha publicado este martes el cuarto volumen de las historias del detective Cormoran Strike bajo el nombre de Robert Galbraith
Los fans de J.K. Rowling esperaban impacientes este día. Pero, por fin, ha llegado. Bajo el seudónimo de Robert Galbraith, la escritora británica llega a las librerías con Lethal White, cuarto volumen de las historias del detective Cormoran Strike. La novela, que tiene como escenario las calles londinenses, trata de la angustia mental que sufre Billy y que nubla los recuerdos de un crimen que presenció durante su infancia.
Cuando se estrenó la saga en 2013 con el primer volumen, El canto del cuco, sus ventas no estaban mal, aunque poco tenían que ver con los apoteósicos números a los que está acostumbrada la responsable de dar vida a Harry Potter. Sin embargo, un tiempo después, se destapó la sorpresa y se conoció la verdadera identidad de su autora. En pocos segundos, las ventas en Amazon se dispararon un 500 por ciento, lo que derivó en continuar con la serie. Primero llegaría El gusano de seda (2015) y, un año después, El oficio del mal.
El motivo por el que la británica utilizó un nombre de hombre fue el mismo por el que le obligaron a usar sus iniciales: “puro sexismo”
Pero no siempre le ha parecido bien a sus editores que se sepa su nombre, de ahí a que en el pasado la británica utilizara un nombre masculino, algo que mantiene a día de hoy más bien por marketing comercial y “diversión”. Pero, ¿cuál era el verdadero motivo? “Puro sexismo”, aseguró en su día la escritora. Le aseguraron que no publicaría su historia con un nombre de mujer. Le cerraban las puertas. O aceptaba o se encargarían de que su libro no llegara a las estanterías.
De hecho, no es casualidad que a día de hoy firme con las iniciales J.K. En su día, Rowling se vio nuevamente forzada a esconder su género por imposición editorial. “Mis editores, los que publicaron Harry Potter, me dijeron: ‘Pensamos que este es un libro que atraerá a muchos niños y niñas. ¿Podríamos usar tus iniciales en vez de Joanne?’”, explicó la autora durante una entrevista en la CCN. Creyeron que, disfrazando su género, el libro tendría mayor acogida que postulándose como lo que es, una mujer.
Por suerte, el pequeño engaño duró poco tiempo. “Gané un premio y obtuve un gran reconocimiento en Estados Unidos, así que pude liberarme”
Por suerte, el pequeño engaño duró poco tiempo. “Gané un premio y obtuve un gran reconocimiento en Estados Unidos, así que pude liberarme”. Las artimañas acabaron para ella, aunque conservó las iniciales porque “al fin y al cabo eran las mías, aunque desearía haberlas escogido por razones muy distintas”, confiesa. “En ese momento y para ser honesta, si me hubieran dicho que debía llamarme Rupert probablemente habría aceptado. Lo necesitaba. Pero ahora me gusta tener un seudónimo, es como si tuviera una doble identidad y me sirviera para salvaguardar mi vida privada”, responde la literata sobre por qué continúa firmando todavía hoy con su versión masculina.
Respecto a su nueva publicación, la propia Rowling ha confesado en sus redes que se sentía algo nerviosa. “El día de publicación siempre es emocionante para mí. No importa la cantidad de libros que haya escrito. Espero que os guste”, escribía en Twitter. Para leerlo en castellano, los lectores deberán esperar a 2019, pues la editorial Salamandra será la responsable de traerlo a las librerías. Por ahora, los fans tendrán que conformarse con la versión inglesa.
En ese momento y para ser honesta, si me hubieran dicho que debía llamarme Rupert probablemente habría aceptado. Lo necesitaba. Pero ahora me gusta tener un seudónimo, es como si tuviera una doble identidad”