Barcelona acogerá el próximo gran superordenador europeo
MareNostrum 5
La Comisión Europea financiará con 100 millones de euros la mitad del coste de construcción y mantenimiento de la máquina. La instalación entrará en servicio a finales de 2020
El Barcelona Supercomputing Center-Centro Nacional de Supercomputación (BSC-CNS) albergará uno de los próximos grandes superordenadores de Europa, según ha anunciado hoy la Comisión Europea. La máquina se llamará MareNostrum 5 y tendrá un rendimiento máximo de 200 petaflops (200.000 billones de operaciones por segundo), que multiplicará por 18 el del núcleo del actual MareNostrum 4 (11,1 petaflops), el superordenador principal del centro.
Hasta ahora, cada estado miembro de la UE debía financiar sus propias máquinas, pero, para competir a nivel mundial en esta área, los países europeos decidieron aunar fuerzas a través de la iniciativa EuroHPC (HPC son las siglas de High Performance Computation, computación de alto rendimiento en inglés). La Comisión Europea financiará con 840 millones de euros la construcción de ocho nuevos superordenadores que deben entrar en servicio antes de 2021, tres de ellos de los llamados pre-exaescala (de más de 150 petaflops) y otros cinco de petaescala (de petaflops). Las tres máquinas más potentes se ubicarán en Barcelona (el propio MareNostrum 5), en Bolonia (Italia) y en Kajaani (Finlandia).
Estos nuevos superordenadores serán el primer paso de un plan de la Comisión para impulsar la supercomputación en Europa y no quedarse atrás en este ámbito estratégico que a nivel mundial lideran EE.UU., China y Japón, actualmente con máquinas de 122, 93 y 10,5 petaflops. La próxima meta será construir superordenadores de exaescala, es decir, con una capacidad de cálculo de exaflops (de un trillón de operaciones por segundo), que se prevén para 2023.
Con los nuevos superordenadores, Europa busca no quedarse atrás en un ámbito estratégico que a nivel mundial lideran EE.UU., China y Japón
En el caso del MareNostrum 5, la Comisión aportará 100 millones de euros. El resto del coste, otros 100 millones, lo asumirán el Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades, la Generalitat de Catalunya, ambos patrones del BSC, y los estados que apoyaron su candidatura: Portugal, Turquía y Croacia, aunque todavía no se ha hecho oficial la distribución de la inversión.
“Estoy convencida de que los nuevos superordenadores [...] potenciarán la competitividad de Europa en el área digital. Hemos demostrado la fuerza de nuestra aproximación europea, que traerá beneficios concretos a nuestros ciudadanos y ayudará a nuestras pequeñas y medianas empresas”, ha declarado Mariya Gabriel, comisaria de Economía Digital y Sociedad, en un comunicado de la Comisión Europea. El nuevo arsenal de superordenadores “es un gran paso adelante para que Europa alcance el siguiente nivel de capacidad de computación; nos ayudará a avanzar en tecnologías orientadas al futuro como el internet de las cosas, la inteligencia artificial, la robótica y el análisis de datos”, según Andrus Ansip, vicepresidente del Mercado Único Digital.
Otro objetivo crucial es que la ciencia y la industria europeas puedan procesar sus datos dentro de la Unión Europea, sin tener que depender de máquinas de otras regiones –ahora mismo, la UE consume más del 30% de los recursos mundiales de supercomputación, mientras que dentro de su territorio sólo aporta el 5%–.
A la convocatoria europea para albergar los tres superordenadores de pre-exaescala se presentaron en abril el consorcio italiano Cineca y el centro finlandés CSC, que contaba con el apoyo de los países del norte, así como el BSC. El BSC tenía el respaldo del Estado español, la Generalitat, y de los gobiernos de Portugal, Croacia, Turquía e Irlanda, que serán los seis integrantes del consorcio que dirigirá el MareNostrum 5.
La Comisión Europea ha seleccionado a los candidatos por criterios técnicos sobre la localización planificada, que el BSC cumplía, seguidos de una negociación política en la que se valoró el apoyo que había atraído cada candidatura. Las tres han conseguido que el visto bueno de la Comisión.
La mitad del coste del MareNostrum 5 lo asumirá la Comisión Europea. El resto, el Estado, la Generalitat y los estados que apoyaron su candidatura: Portugal, Turquía y Croacia
“Estamos muy ilusionados con que España esté en la vanguardia después del trabajo hecho durante muchos años en supercomputación en Europa, que nos pondrá en una posición muy favorable para poder abordar los desarrollos en inteligencia artificial que el país necesita en muchísimas áreas”, ha declarado Pedro Duque, ministro de Ciencia, Innovación y Universidades en funciones, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros de hoy. “Es la culminación a una larga tradición española de apoyo y de apuesta fuerte por la supercomputación, que se inició en 2004 con la creación del Centro Nacional de Supercomputación y la puesta en marcha en 2007 de la Red Española de Supercomputación”.
El president de la Generalitat, Quim Torra, ha afirmado que la selección de Barcelona como sede de uno de los superordenadores más potentes de Europa “garantizará” que Catalunya “lidere la revolución digital y tecnológica” y que ocupe “un lugar de liderazgo en el tema de la computación”, en el 30º Encuentro Empresarial en el Pirineo en La Seu d’Urgell, según informa EFE.
La parte principal del MareNostrum 5 se instalará en un edificio de nueva construcción junto a la capilla de la Torre Girona, de la Universitat Politècnica de Catalunya, donde reside dentro de una caja de cristal el actual MareNostrum 4, que empezó a funcionar en 2017. Algunos componentes del nuevo supeordenador ocuparán parte de este antiguo espacio, aunque el grueso principal llenará 700 metros cuadrados del nuevo edificio. Se prevé que entre en funcionamiento el 31 de diciembre de 2020. La Comisión, el patronato del BSC, que integran el Gobierno de España, la Generalitat y la UPC, así como los países que lo han apoyado, se han comprometido a financiar su mantenimiento hasta 2025.
“Siempre hemos pensado que Europa debía trabajar unida en un área tecnológica en la que competimos con países tan potentes como Estados Unidos, China y Japón, y estamos muy satisfechos de poder decir ahora que Barcelona tendrá uno de los primeros superordenadores incluidos en la nueva hoja de ruta europea de supercomputación”, ha afirmado en un comunicado del BSC Mateo Valero, director del centro. Valero fue uno de los principales impulsores de la iniciativa EuroHPC, con el objetivo de tejer una red europea de supercomputación.