Anorexia nerviosa: cómo identificar los síntomas y actuar a tiempo
ENFERMEDADES
Temor obsesivo a engordar
La anorexia nerviosa, llamada popularmente anorexia, es una enfermedad que provoca temor a engordar y una percepción totalmente equivocada de nuestro cuerpo lo que desemboca en una obsesión por no aumentar el peso. Para ello, el enfermo de anorexia está dispuesto a hacer cualquier cosa.
Suelen comer poco y vomitar después de comer. También pueden volverse adictos al ejercicio y por muy bajos de peso que estén nunca se consideran suficientemente delgados. En realidad se trata de un problema emocional y la anorexia puede ser el resultado de una situación de baja autoestima.
Causas de la anorexia nerviosa
No se ha identificado la causa exacta
No está claro qué causa la anorexia y lo más aceptado por la comunidad médica es que se trata de una conjunción de factores físicos y psicológicos. Puede ser también que entre en juego, en ocasiones, el factor genético, pero no se ha identificado que gen participa. En el aspecto psicológico, pueden influir diversos trastornos que impulsan al paciente a querer controlar su peso de forma obsesiva, especialmente si su entorno está muy influenciado por la apariencia física. La anorexia se da mucho más en mujeres que en hombres y especialmente en niñas y adolescentes.
En ocasiones, la anorexia se desarrolla después de haber realizado varias dietas que hacen pasar hambre a quien las hace. Eso puede influir en el cerebro y predisponer a la persona a llevar su dieta hasta el extremo. Otro desencadenante puede ser un suceso de la vida diaria que haya tenido un impacto emocional muy fuerte.
La anorexia es una enfermedad grave, difícil de curar y que puede tener consecuencias gravísimas llegando a causar la muerte en casos extremos por disfunciones físicas o mentales causadas por un estado de deshidratación y desnutrición. El comportamiento obsesivo por controlar el peso puede producir anemia, pérdida muscular y problemas cardiacos. La desnutrición extrema puede causar el colapso de los órganos del cuerpo. En el aspecto mental, el paciente es proclive a desarrollar episodios de depresión que pueden desembocar en intentos de suicidio.
Síntomas de la anorexia nerviosa
Los síntomas producidos por una mala alimentación
Los síntomas son consecuencia de la falta de alimentación. El primero y más evidente es la pérdida de peso y la delgadez extrema. También es frecuente que vivan en un estado permanente de cansancio debido a la mala nutrición y que tengan problemas para dormir con normalidad. Es normal que se produzcan mareos y desmayos debido a que la presión arterial es muy baja.
Toda esta obsesión por controlar el peso obliga al enfermo a no comer, pero a esconder este hábito. En ocasiones comen muchísimo, pero inmediatamente después se provocan el vómito (bulimia). También suelen abusar del ejercicio físico. Una costumbre habitual es la de mirarse en el espejo muchas veces al día y en intentar disimular la delgadez tapándose con un exceso de ropa.
Diagnóstico de la anorexia nerviosa
Un complejo análisis para diagnosticar con precisión
Hay diversas pruebas médicas para determinar si el paciente tiene anorexia. La primera de estas pruebas es realizar un examen físico general que incluye saber el peso del enfermo medir todas sus constantes vitales. Esto irá acompañado de un análisis de sangre. Por otra parte, hay que evaluar el estado psíquico de la persona.
Tratamiento y medicación de la anorexia nerviosa
Un complejo tratamiento con intervención de diversos especialistas
El tratamiento de la anorexia implica a diversos especialistas del campo de la salud, como el profesional de medicina general, especialistas en nutrición, psicólogos, psiquiatras y dietistas. El tratamiento ha de ser constante y se extiende durante un periodo largo de tiempo. Puede ser necesario internar al enfermo en un centro especializado para poder realizar un seguimiento detallado de la enfermedad.
Evidentemente, lo que se busca con el tratamiento es que la paciente recupere su peso habitual y lo haga por su propia voluntad. Hay que realizar una terapia que incluya la participación de la familia y de las personas del entorno de la persona enferma. Lo más probable es que la persona enferma no quiera recibir el tratamiento, lo que supone una dificultad añadida. No hay medicamentos adecuados para la anorexia y los que se recetan son para tratar trastornos colaterales como la depresión o problemas cardiacos.
Prevención de la anorexia nerviosa
Prestar atención a síntomas precoces
No hay manera efectiva de prevenir la anorexia nerviosa. Lo único que debe hacerse y que puede ayudar al tratamiento es estar pendiente de posibles síntomas que permitan un diagnóstico precoz. Esto ayuda a que el tratamiento sea más efectivo.