¿Quién es quién en las protestas en Polonia?
Europa
Los manifestantes en Polonia protestan contra la restricción del aborto, las medidas del gobierno ultraconservador y del poder que tiene sobre la justicia, así como de la influencia de la Iglesia en la política
Polonia ha vivido una ola de manifestaciones masivas después de que el Tribunal Constitucional polaco anunciase que interrumpir el embarazo debido a malformaciones del feto iba en contra de la Constitución, la ley principal del país. Eso implicaba casi prohibirlo.
La influencia de la Iglesia en el partido ultraconservador que gobierna, Ley y Justicia (PiS), y el poder que este tiene sobre el poder judicial han sido los principales motivos que han impulsado el fallo del Tribunal Constitucional.
Sin embargo, las manifestaciones, las más multitudinarias en décadas, han provocado que el gobierno se haya tomado un tiempo para pensar si oficializan la decisión del Tribunal Constitucional.
Ley y Justicia (PiS), un partido ultraconservador en el gobierno
El gobierno está presidido por Andrej Duda, del partido de ultraconservador Ley y Justicia (PiS). Ganó las elecciones en julio del 2020 y renovó mandato, ya que gobierna desde 2015. El partido fue fundado hace veinte años por uno de los hombres más influyentes del país, Jaroslaw Kazinski, jurista y político conservador polaco.
El PiS es un grupo conservador, nacionalista, proteccionista, populista y euroescéptico: eso significa que desconfía de la Unión Europea a pesar de formar parte de ella. También ha llevado a cabo medidas de corte más social. Una de las más reconocidas es la llamada ‘500+’, una subvención a las familias de más de 100 euros por cada uno de los hijos.
También defiende los valores católicos más tradicionales, por lo que ha buscado limitar el aborto y rechaza el matrimonio homosexual. De hecho, casi una tercera parte de las ciudades polacas se han declarado “zonas libres de ideología LGTB” bajo su gobierno. Allí la homosexualidad no está prohibida, pero provoca que muchas personas tengan miedo de vivir su sexualidad libremente por miedo a las represalias.
También rechaza las minorías. El gobierno tiene afinidad con el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, o con el partido Vox en España.
El poder judicial, en juego
En Polonia, el Tribunal Constitucional está formado por jueces afines al gobierno. De hecho, el partido gobernante colocó a 14 de los 15 jueces que hay gracias a una reforma que impulsó.
Desde que subió al poder, la Comisión Europea ha abierto varios expedientes en el país porque consideran que no está respetando la máxima democrática de la separación de poderes.
Un país profundamente católico
Según datos del 2017 de la Estadística de la Santa Sede, el 92% de la población en Polonia es católica (bautizada en el catolicismo). Esta cifra tan alta responde a un momento muy clave en la historia del Estado: la iglesia apoyó los movimientos obreros y al líder político Walesa para hacer caer el comunismo en el país en 1990.
Actualmente, la iglesia tiene mucha influencia en la sociedad y en la política, especialmente sobre el partido gobernante, del que es un gran aliado. Ambas partes comparten las mismas creencias sobre la vida y la muerte, que para ellos pertenecen a Dios. Por ello, la Iglesia también es contraria al aborto.
El apoyo del clero al endurecimiento del aborto ha provocado rabia entre los manifestantes. Algunos han interrumpido misas en señal de protesta. Con estas actuaciones y los casos destapados de pederastia, la iglesia en Polonia va perdiendo fieles.
Un país alzado
Las grandes manifestaciones debido al intento de prohibición casi total del aborto son muy significativas para la sociedad polaca: el país está poniendo límites al gobierno de Duda porque creen que están yendo demasiado lejos.
Los resultados electorales de las últimas elecciones han sido muy ajustados y demuestran que la población está muy polarizada. Mientras la parte más rural del país defiende los valores tradicionales de la iglesia y la familia, las grandes ciudades y los jóvenes piden modernidad, progreso en derechos sociales e igualdad.
Aunque el movimiento de manifestantes es muy amplio, las que más están alzando la voz en las calles son las mujeres, ya que la ley atenta contra su derecho a decidir. En un comunicado, la Federación Internacional de Planificación Familiar en Europa ha remarcado que los derechos de las mujeres son derechos humanos y universales y que hay que defenderlos.
Periodistas y activistas feministas polacas también subrayan el derecho a una salud digna, tanto física como mental de las mujeres. Apuntaron que con esta restricción crecerán los abortos clandestinos y podrían quedar heridas emocionales graves en madres y parejas.