Miquel Morera, uno de los últimos supervivientes de la Quinta del Biberón, ha fallecido a los 104 años. El Govern de la Generalitat de Pere Aragonès le otorgó la Creu de Sant Jordi en julio de 2023, y ahora ha anunciado públicamente su fallecimiento, acaecido el pasado 5 de diciembre.
El Govern le otorgó la Creu de Sant Jordi por su “importante papel” en la preservación de la memoria democrática de Catalunya: Morera fue delegado de prensa de l'Agrupació de Supervivents de la Lleva del Biberó-41 y relató su experiencia en el libro Un noi al front. Una joventut trencada (1936-1945), de Libros de la Matrícula.
La Quinta del Biberón se compuso en Catalunya de unos 27.000 jóvenes, de entre 17 y 18 años. Una parte de ellos fueron movilizados en 1938 por la Segunda República, y otros por el ejército franquista.
Morera combatió en el frente de Aragón con la Columna Macià-Companys cuando tenía 16 años: se alistó como voluntario como ayudante de su padre, que era armero, y luchó en la batalla de Teruel y en la de Valsequillo. Al final de la guerra fue denunciado por republicano y detenido, junto con su padre. Interrogado y torturado en la cárcel Modelo de Barcelona, fue trasladado a los campos de concentración de Horta y Reus, donde pasó dos años.
Tras otros 4 años realizando el servicio militar de castigo en el ejército franquista, se reincorporó a la vida civil, en el trabajo del metal, fabricando herrajes y complementos para prendas de cuero como zapatos y cinturones, así como piezas de bisutería.