A lo largo de esta semana se espera que se publiquen las listas de definitivas de las adjudicaciones de verano para los docentes de cara al curso 2024/25 que empieza en apenas seis semanas. Unas adjudicaciones que llegaron con retraso y con polémica por las quejas de sindicatos y de maestros que denunciaron que la adjudicación provisional los mandaban a un centro a más de 100 kilómetros de casa o de una especialidad no escogida. Hasta 3.516 presentaron reclamación y esperan el desenlace para esta semana.
No hay por ahora fecha prevista de la publicación del listado definitivo. Fuentes del departamento d’Educació se han limitado a decir que será “pronto”. “Deben salir a lo largo de esta semana pero nos habría preocupado que salieran hoy porque querría decir que no se han mirado todas las reclamaciones”, asegura Iolanda Segura, portavoz del sindicato USTEC. Porque el 5,4 % de los docentes que habían solicitado plaza para el curso que viene en las adjudicaciones de verano han acabado rellenando una reclamación, según el departament.
3.516 reclamaciones
Tener plaza a más de 100 kilómetros de casa o en una especialidad no solicitada, alguna de las objeciones
Del total de 65.519 recibidas, 3.516 han presentado una alegación por estar disconformes con la asignación en la mayoría de casos porque les tocaba ir a trabajar muy lejos de su domicilio, por haber recibido plaza para una tarea que no era de su especialidad, por adjudicaciones a centros de alta complejidad aunque no habían sido escogidos por el solicitante o por designaciones en aulas de acogida cualquiera que sea la especialidad del docente. Desde el jueves Educació trata de elaborar un listado definitivo teniendo en cuenta las quejas. La propia consellera Simó afirmó que se trabaja para resolver “con mucho cuidado” todas las reclamaciones recibidas y que esta es ahora la “prioridad” de la conselleria y los servicios territoriales. Simó reiteró que la dificultad ha venido por el proceso de estabilización, que ha incorporado a unos 31.000 funcionarios al sistema.
Educació publicó el lunes 15 de julio las adjudicaciones, de entre las 62.354 solicitudes, entre funcionarios e interinos, y 3,8 millones de peticiones de puesto de trabajo recibidas. Los sindicatos y docentes afectados han criticado el proceso y haber obtenido adjudicación en un centro lejos de su residencia.
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El departament ha explicado que este año ha aumentado “mucho” el número de funcionarios en prácticas a los que había que asignar plaza por el proceso de estabilización para reducir el ratio de personal interino por debajo del 8 % que manda la Unión Europea. Según los datos de Educación, el número de funcionarios que pidieron una plaza provisional fue de 35.428 (el 74,57% de las plazas a adjudicar), mientras que el año pasado fue de 17.882 (el 40,33% de las plazas a adjudicar). En 2022 la cifra fue de 11.166 (el 26% de plazas a adjudicar). Este volumen de funcionarios a colocar ha hecho que la adjudicación de plazas de verano se retrasara en su fase provisional y, como efecto dominó, en su fase definitiva manteniendo a la comunidad educativa en espera. Fuentes del departamento explican que “a diferencia de un interino, el funcionario solo puede ocupar una plaza a jornada entera y debe ser adjudicado de oficio si no se puede cumplir con la voluntad expresada por el opositor, en función de la especialidad y la proximidad territorial, si frente a él hay otros opositores con mayor puntuación”. A pesar de la polémica, la conselleria insiste en que el 97% ha obtenido una plaza en una de las primeras 3 comarcas de su solicitud.
