Un completo estudio sobre la afluencia en la Pica d’Estats, el Aneto, el Monte Perdido y el Pedraforca corrobora que, a pesar de las restricciones de movilidad impuestas por la covid, el 2020 se reveló como el año del gran desembarco en la naturaleza, y todo hace suponer que la historia se repetirá a lo largo de este 2021. Para muestra, las cifras de lo sucedido en las dos montañas más emblemáticas de Catalunya: la Pica y el Pedraforca. En la primera, de julio a agosto se contabilizaron 7.299 excursionistas, un 66% más que en el mismo periodo del 2019, mientras que la segunda fue coronada por 17.659, un 34% más.
El autor, Víctor Dorado
Tesis doctoral sobre la afluencia en las montañas más emblemáticas
Víctor Dorado, del Inefc de Lleida, está inmerso en un ambicioso trabajo que culminará en su tesis doctoral sobre la masificación y gestión sostenible de las cumbres más icónicas de España. La investigación se centra en documentar el número de hombres y mujeres que cada día suben estos cuatro picos, además del Mulhacén, gracias a la información recogida en los contadores dispuestos en las rutas de ascenso y a las entrevistas realizadas in situ.
Las largas semanas de reclusión alimentaron, y alimentan, un voraz apetito de aire libre, no sólo en las montañas más modestas y asequibles sino también en las más exigentes. En una sola jornada, el sábado 4 de julio, el Pedraforca, de 2.506 metros, fue coronado por 734 personas.
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El Pedraforca, de 2.506 metros, es una de las montañas más solicitadas
El hecho de disponer de una serie histórica de diez años del Pedraforca permite realizar un pormenorizado análisis de este enclave del parque del Cadí-Moixeró. A priori, todo hacía suponer que el confinamiento reduciría las salidas durante el 2020. Una verdad a medias. Lógicamente durante los meses de reclusión esos destinos apenas recibieron a nadie pero al abrirse la circulación por todo el territorio la gente no se lo pensó dos veces y tomó con frenesí los espacios naturales.
El Pedraforca, más cerca de Barcelona, superó todos los récords durante el periodo estival. En julio dio la bienvenida a 6.311 excursionistas frente a los 4.782 del 2017, el número más alto hasta el momento; en agosto, 6.316 frente a los 5.559 del 2016, y en septiembre, 5.032, en comparación con el máximo de 4.376 del 2018. Incluso globalmente, en el 2020, fueron 27.678 los ciudadanos que culminaron sus 2.506 metros, 322 más que en el 2019, y el segundo año con más afluencia. El primero fue el 2017, con 29.694, según el registro facilitado por el Inefc.
Alegría tras coronar el Pedraforca, en una foto del verano del 2019
En la Pica y en el Monte Perdido
El fin de semana de la Diada, el más concurrido
El 12 de septiembre, el fin de se mana de la Diada Nacional de Catalunya, fue la jornada más concurrida en la Pica d’Estats (3.143 metros, con 413 personas, y en el Monte Perdido (3.355 m.), con 475. No se dispone de los resultados del Aneto (3.404 m.) pues todavía no se han podido procesar los datos del último cuatrimestre de su contador.
Excursionistas camino de la cima del Aneto
El Monte Perdido, más solicitado que la Pica y el Aneto
La cumbre de 3.355 metros recibió 7.032 excusionistas en agosto
En el Pirineo, el Monte Perdido, de los tres analizados, es el que tiene mas capacidad de atracción. Solo en agosto albergó a 7.032 deportistas frente a los 3.913 del Aneto y los 3.118 de la Pica d’Estats. En esta última, la tendencia también se manifestó al alza con las citadas 7.299 cimas en los tres meses de verano. Y de hecho, en septiembre vio llegar a 1.950 ciudadanos, lo que representa el triple respecto al año anterior.
El objetivo es crear una guía de buenas prácticas para prever situaciones de masificación y gestionarlas de manera sostenible con medidas suaves y, solo en última instancia, si estas no funcionan, con soluciones más duras
Una parte de la tesis doctoral de Víctor Dorado, dirigida por Estela I. Farías, subdirectora de investigación del Inefc de Lleida, se centra en analizar los flujos en estas montañas, la preparación y experiencia de los excursionistas, el gasto que hacen en cada zona y la capacidad de carga. Pero el objetivo final “es crear una guía de buenas prácticas para prever situaciones de masificación y gestionarlas de manera sostenible con medidas suaves y, solo en última instancia, si estas no funcionan, con soluciones más duras, en la línea de cerrar los accesos a parkings y a pistas en días puntuales”, explica Dorado.
El Monte Perdido es la montaña que registró más visitantes, en agosto, de las tres analizadas de los Pirineos
“La Pica d’Estats ya supera la capacidad de carga, se puede hablar de masificación temporal, de momentos críticos que se traducen en atascos y que por tanto incrementan la vulnerabilidad del visitante. Cabe apuntar que todos van a la misma hora, también en los otros picos, pero en el Monte Perdido la cumbre es más grande y la gente se distribuye mejor, y en el Aneto son muchos los que se quedan antes del Paso de Mahoma, aún así también se producen colas”, añade.
El dato
La masificación influyó de manera negativa en la experiencia de la ascensión para casi el 41% de los que subieron el Pedraforca
Las aglomeraciones influyeron de manera negativa en la experiencia de la ascensión para casi el 41% de los que subieron el Pedraforca; el 39% de los del Monte Perdido; cerca del 36% de los del Aneto, y el 32% de los de la Pica, según las entrevistas realizadas por el equipo del Inefc.
Tras difundirse, el pasado verano, las fotos de la Pica d’Estats atestada de gente saltaron todas las alarmas, tanto por cuestiones de seguridad como por el impacto en el medio natural de tal hacinamiento de excursionistas. Preocupa el rastro de suciedad, el escaso respeto por el entorno de algunos y, en el peor de los casos, los comportamientos de riesgo que pueden acarrear accidentes.
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El debate
Aplicar restricciones los días punta para evitar aglomeraciones y reducir impactos
La Federació d’Entitats Excursionistes de Catalunya (FEEC) reaccionó pidiendo al Departament de Territori i Sostenibilitat de la Generalitat que pusiera en marcha una mesa de trabajo para estudiar con urgencia cómo regular la afluencia a zonas con tanta gente. Hasta el momento, no se ha creado, aunque desde Territori responden que una de las líneas de trabajo es “establecer un sistema de reserva de aparcamiento y de pago por vehículo y día, algo que debe hacerse con el consenso del territorio”.
Lo que sí está claro es que es necesario aportar soluciones lo antes posible para neutralizar comportamientos incívicos en zonas de alto valor ecológico, a la vez que promover conductas responsables para evitar accidentes. Sin un poco de diligencia, la historia puede repetirse.
Bombers de la Generalitat
Más rescates en la montaña a pesar del confinamiento: un total de 1.009
Los Bombers de la Generalitat realizaron durante el 2020 un total de 1.009 rescates en la montaña, 140 más que en el 2019. Pero lo más preocupante es el aumento de víctimas mortales, de 21 a 27. En lo que llevamos del 2021, y a pesar de las limitaciones de circulación, los bomberos han acometido 165 rescates hasta el pasado día 15, solo 24 menos que durante el mismo periodo del 2019 sin restricción alguna.
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Regla básica, contar a alguien el itinerario
Avisa de la ruta, de lo contrario mira '127 horas'
Quien haya visto '127 horas', de Danny Boyle, se le habrá encogido el corazón al presenciar cómo su protagonista hecha mano de una precaria navaja para amputarse el brazo y tener alguna posibilidad de sobrevivir tras quedarse atrapado en una roca, en Utah. La película está basada en una historia real, la del montañero Aron Lee Ralston, que un día decidió salir a explorar en solitario el cañón de Bluejohn y cometió el gran error de no explicar a nadie el itinerario que había previsto seguir. Fatal decisión. Entre las normas esenciales del buen excursionista, o al menos del más prudente, está verificar el parte meteorológico antes de salir, ir bien equipado y contar a alguien el recorrido que se piensa realizar. Por si acaso. Ralston lo obvió igual que cerca del 20% de las personas que asciende la Pica d’Estats y el Pedraforca, tal como refleja el estudio de Víctor Dorado. En el caso de los que culminan el Aneto son casi el 14% y en el Monte Perdido, el 17%. En la montaña toda precaución es poca, son demasiadas las veces que surgen imprevistos que, a la postre, pueden derivar en trágicos desenlaces. La investigación de Dorado también indica que un 20% de los que suben el Pedraforca no tienen experiencia en montañismo, porcentaje que se sitúa en el 21% en el Monte Perdido, el 18% en la Pica y el 8% en el Aneto.