Los espectadores en general sabrían identificar perfectamente a Jorge Javier Vázquez, María Patiño o Kiko Hernández, pues son algunos de los personajes más famosos de la televisión dedicada al mundo del corazón. Sin embargo, pocos recordarán que este tipo de programas de crónica social, en lo que el profesional se confunde con el personaje, en el que los conflictos y enfrentamientos están a la orden del día; tuvieron un modelo de referencia al que seguir. Estamos hablando de Tómbola, el programa de corazón más polémico de los 90, presentado por Ximo Rovira, que por aquel entonces se convirtió en uno de los referentes de la televisión.
Tómbola se convirtió en el programa de la época, y Ximo Rovira en su paciente moderador. Un papel imposible a la hora de controlar a pesos pesados como Jesús Mariñas, Karmele Marchante o Lydia Lozano, que se enfrentaban sin miramientos a los personajes que desfilaban por la silla de invitados. Un reto que el madrileño logró mantener durante nada menos que siete años, y que le convirtió en el modelo a seguir de este tipo de espacios.
Ximo Rovira se enfrentó a las entrevistas más explosivas de personajes como Belén Esteban, Antonio David Flores o Carmen Ordoñez.
El presentador madrileño es uno de los comunicadores pioneros del corazón que conocemos hoy. Nacido en Madrid y valenciano de adopción, ya que se trasladó a Gandía con tan solo 10 años, inició su carrera en la radio local, siendo periodista en la Cadena Ser desde 1984 hasta 1989. Un año después daba el salto a la televisión, uniéndose en 1990 a Canal 9, recién creado y que se convertiría con el tiempo en el canal más importante de la televisión en la Comunidad Valenciana. Allí hizo sus primeros pinitos como presentador, primero con el concurso Tria Tres (1990) y luego como colaborador en el programa musical Olé tus vídeos (1991), presentado por Rosa María Sardá.
Una experiencia que continuó engordando con diversos trabajos tanto en radio como televisión en Canal 9, donde coincidió con periodistas como Núria Roca, hasta que llegó su gran oportunidad en 1997: Tómbola, que comenzó a emitirse no solo en Canal 9, sino también en otras cadenas locales como Canal Sur o Telemadrid. Un programa revolucionario con excelentes datos de audiencia gracias a sus polémicas y enfrentamientos, que terminaría en 2004.
Ximo Rovira con Belén Esteban, el 13 de julio del 2000.
Tras el éxito de Tómbola, todo parecía indicar que Ximo Rovira seguiría dedicado al mundo del corazón, pero nada más lejos, porque el polémico programa le sirvió de trampolín para dedicarse a otro tipo de contenido. Así, hizo las veces de director en el programa Escàner, para luego presentar el magacín vespertino El Café de Ximo y el programa infantil Xamba.
Un comunicador versátil que, finalmente, daba el salto a la televisión nacional con Unan1mous, en Antena 3, que obtuvo unos bajos datos de audiencia, por lo que fue cancelado. En Antena 3 volvió al mundo del corazón sustituyendo a Jaime Cantizano en 2007 y 2008 en el entonces programa estrella de la crónica social, ¿Dónde estás, corazón? Que seguía la estela del extinto Tómbola.
Ximo Rovira, en 'L'Arrós de Ximo'.
Desde entonces, Rovira ha permanecido en un segundo plano trabajando en la televisión y la radio local valenciana, en Grupo Levante tras el cierre de Canal 9, dirigiendo y presentando diversos programas de temas tan diversos como la gastronomía, los temas sociales o magacines de actualidad.
Una vida personal muy discreta
De la vida personal del comunicador poco se sabe, salvo que en la actualidad está divorciado y tiene dos hijos. El mayor, de 27 años, se trasladó a Suecia a terminar sus estudios superiores de doctorado hace unos años, mientras que el pequeño permaneció en Valencia, donde ha estudiado Ingeniería Informática, por lo que ninguno de los dos seguirá los pasos de su famoso padre.
El comunicador no sale mucho de su tierra, pero sigue manteniendo una buena relación con todos aquellos personajes que le convirtieron en el referente de un formato que revolucionaría la televisión española.