Jaime gana quedándose a dos letras del bote de 'Pasapalabra' tras casi caer eliminado
Duelo
El concursante ya ha estado a punto de irse del concurso la semana pasada
'Pasapalabra' reparte premios millonarios sin necesidad de llevarse el bote
Jaime sonríe aliviado
Jaime se acerca a los 100 programas en Pasapalabra. Lo hace después de Orestes y ya son el duelo más largo en la historia del programa.
Pero lo consigue en un momento muy complicado. La prueba de "La silla azul" ya estuvo a punto de eliminarlo el pasado viernes y en el programa anterior estuvo a punto de irse Orestes. Los aspirantes a concursantes tienen mucho nivel y esta vez el gallego tenía que darlo todo.
Jaime tuvo que enfrentarse a 'La silla azul'
Jaime se enfrentó a Mari Ángeles, licenciada en ciencias químicas, es profesora de máster, además de ser una gran viajera. Y no se lo puso fácil, ya que el veterano llegó a tener un fallo, algo que le dio mucha tensión a la prueba, aunque al final acabó ganando.
Los invitados se repitieron, Boticaria y Juanjo Ballesta estuvieron en el equipo azul con Jaime. Orestes jugó junto a David Guapo y Clara Nieto.
Los invitados fueron los mismos del anterior programa
El programa empezó muy igualado y tras la primera prueba solo había una distancia de dos segundos. Pero "La pista" se le dio muy mal al equipo naranja y acabaron con solo 29 segundos, frente a los 40 del equipo azul.
Con las otras dos pruebas, Orestes pudo recortar algo la distancia, pero no llegó a empatar. Finalmente se quedó a seis segundos de su rival justo antes del Rosco.
El bote ya supera los 800.000 euros
El Rosco fue especialmente complicado para ambos concursantes. Jaime empezó bastante inseguro y dejó pasar muchas palabras.
Al contrario que Orestes que fue lanzado desde el primer momento, tanto que acabó fallando en la primera vuelta. "Primeravueltismo" llamó a Roberto Leal a las prisas por acabar el primer círculo lo antes posible.
Finalmente, Orestes falló dos veces más y se plantó dejando a Jaime solo ante su rosco. La segunda vuelta para él fue mucho mejor y se quedó solo con dos palabras del bote. Se arriesgó en una letra por ver si se quedaba a una, pero falló. Jaime reconoció que no sabía la última y se tuvo que quedar con la "simple" victoria.