Luis Tosar y Anna Castillo comenzaban la semana de invitados en El Hormiguero . Pablo Motos recibía a los intérpretes de Adú, un trabajo que les llevó a grabar hasta África. Además de comentar la ceremonia de los premios Goya, la invitada confesó que fue ‘detenida’ con solo doce años por el robo de unos tampones en un supermercado.
El presentador no quiso perder la oportunidad de preguntar a los invitados por su experiencia en Málaga el pasado sábado. Como es habitual cada año, las críticas sobre la larga duración de la gala se han sido generalizadas. Anna confesaba que la vivió mucho más relajada porque dio el premio que le correspondía al comienzo de la misma.
Tosar, en cambio, dejó claro que no tuvo una noche agradable. Al preguntar Motos qué lo había pasado, el actor le confesó que “tenía un dolor de cabeza increíble desde la primera media hora, así que imagínate”. Su compañera, en cambio, pudo disfrutar de hablar con compañeros, tomarse algo y disfrutar de la fiesta desde fuera.
Tanto Luis como Anna comentaron que prefieren no llevar preparado nunca un discurso a las galas de premios para evitar desilusiones. La actriz reconocía que si tiene claro que no va a ganar prefiere no ir con nada escrito a este tipo de actos, aunque suele ser nominado habitualmente. “Me da mucho pudor prepararme un discurso que no voy a ganar”, aclaraba.
El protagonista de Celda 211 y Los lunes al sol aseguró que siempre acierta con sus pronósticos en estos casos. “No sé si es porque soy extremadamente inteligente, pero siempre que no he ganado el Goya tenía una idea de quién lo iba a ganar”, explicaba. Esa es la manera de evitar tener que preparar sus discursos.
Pero no es la única costumbre inesperada del exitoso actor. Aunque en la última gala de los Goya no tuvo suerte, es uno de los artistas más premiados del cine en nuestro país. Pero parece que le incomodan y prefiere tenerlos fuera de su vista para que no suban mucho su ego. En cambio, su compañera de reparto de Adú prefiere tenerlos “en el salón de casa”, para poder verlos.
Aunque es una de las actrices más reivindicativas y atrevidas del momento, Anna Castillo esconde algo que sí le atemoriza. “Me da mucho miedo volar”, confesaba durante su entrevista en El Hormiguero . Durante su viaje por África tuvo que hacer frente a sus miedos con medicamentos, lo que provocó que estuviese muy feliz cuando le comentaron que su avión estaba averiado durante una escala en Casablanca.
La noche estuvo llena de confesiones en El Hormiguero . Castillo tuvo que reconocer, por una indiscreta pregunta de Trancas y Barrancas, que con solo doce años fue detenida. El delito no fue otro que un robo de tampones en un supermercado junto a una amiga. Ambas querían “experimentar” y descubrir la manera de usarlos.