Detenidos 21 miembros clan familiar de traficantes que secuestró a un empresario
En Barcelona y Tarragona
Los Mossos han desmantelado 11 plantaciones de marihuana e intervenido siete armas de fuego
Momento en el que un agente detiene a uno de los integrantes del clan familiar dedicado al tráfico de drogas que secuestró a un empresario
Los Mossos d’Esquadra han detenido a 21 presuntos miembros de un clan familiar dedicado al tráfico de drogas que había secuestrado a un empresario, a quien reclamaba una deuda de 250.000 euros, y han desmantelado 11 plantaciones de marihuana e intervenido siete armas de fuego.
La policía catalana ha informado hoy de que las detenciones se produjeron el pasado 17 de julio en Sant Pere de Ribes (Barcelona) y otras localidades de Barcelona y Tarragona y el juez ordenó el ingreso en prisión de 11 de ellos. La investigación se inició el mes de octubre de 2018 tras conocer el caso de un hombre que había sido retenido en contra de su voluntad durante dos días y a quien le reclamaban una deuda de 250.000 euros.
El clan reclamaba una deuda de 250.000 euros al empresario que secuestró
Tras detener a los secuestradores, cuatro hombres de una misma familia de Sant Pere de Ribes, los agentes comprobaron que formaban parte de una organización que se dedicaba básicamente al cultivo y tráfico de marihuana.Ante estos hechos, el pasado 17 de julio la policía llevó a cabo un operativo con 32 entradas y registros en las localidades de Sant Pere de Ribes, Vilanova i la Geltrú, Cubelles, Canyelles, Segur de Calafell, El Vendrell, Sant Jaume dels Domenys, Viladecans, Sant Esteve Sesrorives y Martorell.
En los registros se intervinieron más de 47.000 euros en efectivo, siete armas de fuego con munición y cargadores, dos armas de aire comprimido y un machete de grandes dimensiones, y desmantelaron 11 plantaciones de marihuana en funcionamiento, 4 en proceso y se decomisaron 4.070 plantas y 6 kilos de marihuana.
La organización se dedicaba básicamente al cultivo y tráfico de marihuana
Durante el operativo los agentes comprobaron que la organización había instalado un sofisticado sistema de videovigilancia en distintos puntos del barrio del Pou Merlí de Martorell para controlar los movimientos de la policía y de posibles grupos rivales. Los Mossos también intervinieron 49 cuentas bancarias, 15 inmuebles y 51 vehículos, que sumarían una cantidad superior al millón y medio de euros, a nombre de distintas personas de la organización y que habrían sido financiados con dinero procedente del tráfico de drogas.
A los detenidos se les imputa los delitos de pertenencia a organización criminal, secuestro, lesiones, detención ilegal, amenazas, extorsión, robo y hurto de uso de vehículos con intimidación, contra la salud pública, blanqueo, obstrucción a la justicia y defraudación del fluido eléctrico.