Las claves de la investigación judicial de la detención del Raval
La juez Moltó defiende en su auto la imparcialidad, abunda en la destrucción de pruebas y subraya la credibilidad de los testigos
El auto judicial hecho público ayer ofrece las claves de las investigaciones sobre el caso del Raval, cuando Juan Andrés Benítez murió en el hospital Clínic tras haber sido reducido en la calle Aurora. La juez defiende en la resolución su imparcialidad, las pesquisas del Cuerpo Nacional de Policía y la credibilidad de los testimonios de los testigos presenciales.
LA CAUSA DE LA MUERTE. La juez desvincula la muerte de Juan Andrés Benítez de la pelea que mantuvo con su vecino de la calle Aurora, para relacionarla con la posterior actuación de los Mossos d'Esquadra. Así, describe cómo en las imágenes se ve a "una serie" de agentes que se encuentran "encima de una persona, propinándole algunos de ellos golpes, puñetazos y patadas". El escrito alude a los lamentos de Benítez, "prosiguiendo las agresiones una vez cesaron los gritos". Esta prueba gráfica se complementa con la autopsia, que define la muerte como causada "por múltiples traumatismos sobre la región craneofacial". La magistrada señala que le falta aún el informe definitivo de autopsia y el historial médico del fallecido para orientar las pesquisas. Además, la juez declara a la Generalitat responsable civil subsidiaria".
ACTUACIÓN INSÓLITA. En el auto judicial se explica que, en el atestado de la Policía Nacional se recoge la identificación de una persona a quien los Mossos ordenaron destruir una grabación de los acontecimientos. Esta testigo está actualmente fuera de Barcelona y se está pendiente de su regreso para citarla a declarar.Además, se explicita que varios testigos han relatado cómo un agente de los mossos "hizo desaparecer la mancha de sangre que quedó en el suelo, tras retirarse el cuerpo inerte de Benítez, vertiendo agua sobre ella, antes de que los servicios municipales de limpieza actuasen sobre la zona". Estos dos hechos, de confirmarse totalmente, serían dos delitos de obstrucción a la justicia y coacciones.
IMPARCIALIDAD. El apartado cuarto del auto parece dedicado a la rueda de prensa del pasado jueves, cuando la cúpula de los Mossos cuestionó el informe de la policía. Así, escribe que "esta instructora, ya desde el primer momento, ha querido realizar una investigación lo más objetiva, imparcial y extensa" posible previa a adoptar la decisión de imputar a ocho agentes de la autoridad por delitos graves. Por eso, encargó la investigación "a un cuerpo policial diverso al que pertenecen los agentes indiciariamente relacionados con los hechos". Además, ha tomado testimonio a once testigos presenciales y al vecino que inicialmente se peleó con Benítez, se han recabado las pruebas audiovisuales y se ha pedido a los forenses "un informe relativo a si las heridas del fallecido pudieron haber sido infligidas con la defensa comúnmente utilizada por los cuerpos policiales, entre otras". Todo ello en aras de que los resultados sean lo más objetivos posibles.
CREDIBILIDAD. Hasta ahora, por el juzgado de instrucción número 20 de Barcelona han pasado once testigos presenciales del suceso. En el auto se dice que han declarado "de manera serena, verosímil, rotunda y sin el menor atisbo de animadversión contra los agentes actuantes". La juez les da crédito y son uno de los pilares en los que se sustenta la imputación de los ocho agentes de los Mossos, lo mismo que las imágenes de vídeo y el informe del Cuerpo Nacional de Policía, al que se hace mención sin reproches. Todos estos aspectos fueron criticados en la rueda de prensa de Interior el pasado jueves, pero por ahora reciben el refrendo policial.
ACUSACIÓN RETIRADA. Al vecino de la víctima le ha sido retirada la acusación. Hasta ahora era el único imputado. Las heridas que pudo infligir a Benítez no fueron importantes. En el juzgado declaró que el fallecido fue agarrado por el brazo por "cuatro hombres policías, dos por cada lado". Todos cayeron al suelo, y allí "lo esposaron y le dieron patadas. Uno le daba con la porra sin extenderla en la zona de la cabeza y del abdomen".