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El PP le quita un escaño al PSOE y Sánchez necesitará el sí de Junts

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EFE/ Borja Sánchez-Trillo

El PP logró anoche, gracias al voto de los españoles residentes en el extranjero, arrebatar sobre la ­bocina un escaño al PSOE. El recuento final del voto CERA (Censo Electoral de Residentes Ausentes) por Madrid cayó masivamente del lado popular, de forma que, al ser un trasvase directo, los de Alberto Núñez Feijóo pasarían finalmente a contar con 137 escaños por los 121 a los que retroceden los socialistas.

La jornada arrancaba bien temprano y, tras varios días librándose la batalla por imponer cada cual su relato, PSOE, PP, Vox, Sumar o Junts, entre otros, coincidían en contener la respiración hasta resolverse el recuento.

Pese a que, uno tras otro, los primeros ocho escaños en juego por un puñado de votos no sufrían alteración alguna, la dirección nacional del PP seguía confiando en que la batalla por Madrid se decidiera a su favor para que, al menos, al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, “no le valiera con una abstención de Junts para ser investido”. Y así será finalmente, por lo que la abstención de la formación de Carles Puigdemont es insuficiente.

Con la mirada puesta en el pabellón habilitado en la Casa de Campo, al oeste de la ciudad, los respectivos vocales de cada partido estuvieron escudriñando al detalle las papeletas de cada una de las 72 urnas dispuestas con las papeletas depositadas durante las semanas previas en las urnas dispuestas en los consulados. Todo con el objetivo de defender cualquier voto a favor o, por el contrario, anular aquellos que pudieran sumar en el casillero rival. “Cada uno cuenta y se luchará hasta el último”, auguraba ayer desde el entorno de Sumar un diputado regional que participó en este mismo recuento hace cuatro años. Y la dilatación del proceso, que se prolongó hasta casi la medianoche, fue la prueba.

Los de Alberto Núñez Feijóo pasarían finalmente a contar con 137 escaños por los 121 a los que retroceden los socialistas

Al margen de Madrid no hubo sorpresas. Ni siquiera Girona y Tarragona, donde las diferencias eran muy reducidas, vieron alterados los resultados del domingo. En la primera, el PP partía con una desventaja de 363 papeletas con respecto de Junts. Pero sus 275 votos fueron insuficientes frente a los 336 de su rival. Mientras que en la segunda, el PSC superó por 658 sufragios a 200 a Junts, aunque fueron insuficientes.

Tampoco en Almería, Córdoba y Baleares, donde el PSOE fue el vencedor de los respectivos recuentos del voto CERA sin la diferencia suficiente para propiciar alteración alguna del reparto de escaños ya establecido, para alivio de los de Alberto Núñez Feijóo, fuerza más votada en las tres circunscripciones.

Y mucho menos en Navarra, donde los socialistas simplemente certificaron su victoria parcial del domingo, o en Ourense, donde el Partido Popular hizo lo propio para confirmarse como fuerza predominante en toda Galicia.

Cantabria también contó con suspense por el retraso originado por tres cajas que llegaron cuando ya había comenzado el recuento. Pero el escaño que bailaba se mantuvo en el casillero de Vox.

El fin del voto rogado, y la reducción de trámites aparejada, ha hecho crecer la participación

Finalmente han sido 233.688 residentes en el extranjero quienes han ejercicio su derecho al voto, lo que supone el 10,04% de los 2,3 millones de españoles registrados en el CERA. Este dato supone una subida del 6,85% respecto a los comicios del 2019 cuando ejercieron su derecho al voto 145.853 residentes en el extranjero de un censo de 2.130.754 de ciudadanos. Un incremento al que ha contribuido la desaparición del sistema del voto rogado. Ese mecanismo que obligaba a los electores a llevar a cabo farragosos trámites previos que, en muchos casos, empujaba a los afectados a desistir de ejercer su derecho al voto.

La participación más alta se ha registrado en Londres, donde ha votado el 18,8% del censo –17.662 españoles–, por delante de París –15,17% para un total de 13.952 personas– y Buenos Aires –6,22% del censo y 18.921 electores–.

Una vez finalizado el escrutinio se abrirá el plazo a los representantes de las candidaturas para presentar las reclamaciones que consideren oportunas ante sus respectivas juntas electorales provinciales. Y una vez resueltos todos los recursos, que en último término pueden llegar a la Junta Electoral Central, o bien cuando ha transcurrido el plazo para su presentación sin que se haya presentado ninguno, se efectuará, presumiblemente el lunes, la proclamación de los candidatos que han resultados electos.