En su pretensión de erigirse en alternativa al Gobierno de izquierdas, el PP ha registrado este viernes en el Senado, donde tiene mayoría absoluta, su propia ley de suelo, que viene a enmendar la plana a la que el Ejecutivo de Pedro Sánchez tiene preparada para llevarla al Congreso pero que tuvo que retirar por falta de apoyos parlamentarios suficientes.
La encargada de presentar a la prensa las líneas básicas de esta proposición de ley, que se suma al plan urgente de vivienda que ultima el PP y que ayer defendió Alberto Núñez Feijóo en un acto con los once consejeros autonómicos populares del ramo y representantes del sector inmobiliario, ha sido la vicesecretaria de desarrollo sostenible de Génova, Paloma Martín, que ha defendido desregular el mercado para que la oferta pueda cubrir la demanda y desburocratizar los trámites para la construcción.
La reforma que plantea el PP implica cambios legislativos en cuatro ámbitos a fin de revertir los topes a los precios de alquiler y la declaración de zona tensionada que introdujo la ley de Vivienda vigente y de agilizar la promoción de pisos llevando el silencio administrativo positivo a los informes sectoriales, para que no se puedan paralizar las obras a la espera de permisos.
Asimismo, como anunció ayer Feijóo desde el Colegio Oficial de Arquitectos de Madrid (COAM), se creará una nueva figura, bautizada por el PP como “proyecto residencial estratégico”, que consisitirá en que durante un periodo de excepción de 48 meses los constructores podrán acceder a una vía administrativa más rápida que la habitual a condición de que la mitad de los pisos de las nuevas promociones estén reservados a vivienda asequible, a precio tasado.
Para el PP, la política de vivienda del Gobierno representa un “modelo fracasado”, puesto que en los seis años que lleva Sánchez en la Moncloa el problema ha pasado del puesto 16.º al primero entre las preocupaciones de los españoles. De ahí que la oposición plantee renunciar al “intervencionismo” que achaca al PSOE y a Sumar. “Esta es la ley, ambiciosa y reformista, necesaria para revertir la situación”, ha asegurado Martín, que, con el apoyo del Senado asegurado por la mayoría del grupo popular en la Cámara Alta, ha adelantado que su partido solicitará a los grupos del Congreso que también la respalden.
“El PP toma la iniciativa en materia de vivienda y adelanta al Gobierno de España”, ha declarado la dirigente popular, que ha acusado al Ejecutivo de “no poder legislar” y ha recordado que tuvo que retirar en mayo su ley del suelo por falta del apoyo de sus socios y para evitar otra derrota parlamentaria. “Todos los pasos los hemos dado en la dirección correcta: hacia una mayor seguridad jurídica en materia de urbanismo y una administración más eficaz en la gestión de los informes”.
Preguntada por La Vanguardia sobre las diferencias entre la ley del suelo del PP y la que planteaba el Gobierno, que contaba con el apoyo del PNV y que ya no está registrada, Martín ha defendido que su propuesta es “mucho más ambiciosa” en las reformas: “Exigimos una administración eficaz, de forma que la no emisión de informes sectoriales o de licencias en los plazos correspondientes tendrá como efecto que se entenderán concedidos, es decir, introducimos el silencio positivo. Además, derogamos los aspectos más lesivos de la ley de Vivienda, como son los índices de precios del alquiler o la declaración de zonas tensionadas”, ha concluido la vicesecretaria del PP.