El Gobierno impulsa una ley para que “buleros profesionales” en redes sociales se vean obligados a rectificar noticias falsas

“Los ciudadanos de este país tenemos derecho a defendernos de los buleros profesionales”, ha argumentado el ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, para justificar el anteproyecto de ley orgánica reguladora del derecho a la rectificación, aprobado este martes en primera vuelta por el Consejo de Ministros, que incorpora como novedad más importante que también los “usuarios de gran relevancia” en las redes sociales, con más de 100.000 seguidores, puedan verse obligados a rectificar noticias falsas.

La norma, que busca sustituir de manera integral a la vigente desde 1984, cuando ni siquiera existían las redes sociales, incorporará así a los que Bolaños ha definido como “profesionales del bulo y de la mentira”. Sin poner nombre y apellidos, que están en la mente de todos en el Gobierno, el ministro ha señalado que algunos de estos usuarios de redes sociales, con amplia difusión, “se dedican a mentir todos los días y a propagar bulos todos los días”.

Este anteproyecto de ley, para el que el Ejecutivo recabará ahora todos los informes preceptivos antes de su aprobación en segunda vuelta y remisión al Parlamento, forma parte del plan de acción por la democracia impulsado por Pedro Sánchez, al que próximamente se sumará otra ley orgánica de protección del derecho al honor. La pretensión del Gobierno, ha asegurado Bolaños, es “promover una mayor calidad en el debate público y facilitar y garantizar el derecho a la rectificación de los ciudadanos, cuando se vean afectados por una información que sea falsa, que sea inexacta, que sea un bulo, que sea en definitiva una mentira”.

La iniciativa, además de afectar a los medios de comunicación tradicionales como hasta ahora, se adentrará por tanto en el actual entorno digital y de las plataformas digitales, para tratar de atajar el actual impacto de “los bulos y las fake news”, sobre todo en el escenario político y en el debate público. Y la gran novedad es la incorporación de los “usuarios relevantes” de redes sociales, aquellos que tengan más de 100.000 usuarios en una red social, o más de 200.000 sumando todas las plataformas.

“Estas personas tienen difusión de las informaciones que propagan mayor que muchos medios de comunicación tradicionales. Y hay profesionales del bulo y de la mentira, que todos los días enfangan nuestro debate público con mentiras y falsedades. También contra ellos se podrá ejercer el derecho a la rectificación por los ciudadanos que se vean afectados por alguna mentira o inexactitud”, ha advertido Bolaños.

El ministro ha asegurado que, con esta norma, “hacemos más difícil la vida de los que se dedican a mentir y a esparcir bulos cada día, y por tanto es una buena noticia para la democracia”. El texto legislativo se ha basado en la jurisprudencia del Tribunal Constitucional, ya que, según ha esgrimido Bolaños, “el derecho a la rectificación favorece la libertad de información, porque la rectificación permite contrastar versiones contrapuestas y desmentir falsedades”.