Sumar y PSOE acumulan agravios a la espera de evaluar el estado de la coalición
Socios de Gobierno
La venta de armas a Israel y el nombramiento de Calvo tensionan la cogobernanza
“La coalición progresista no consiste solamente en respetarse, sino en ensanchar los elementos en común”. Bajo esta premisa, Sumar solicitó el pasado lunes 5 de febrero la convocatoria de la comisión de seguimiento del pacto de gobierno suscrito con el PSOE. Ambas formaciones se emplazaron a celebrar una reunión que, siendo estrictos con el acuerdo de gobierno, tendría que haberse puesto en marcha “en el primer mes desde la formación del Ejecutivo de coalición”. Esto es, en diciembre. Pero, a la espera de la cita, las desavenencias entre los socios de coalición se acumulan. La última, además, en un asunto capital para Sumar: la vivienda.
El Consejo de Ministros dio ayer luz verde a la línea de avales ICO del 20% para la entrada de un primer piso a rentas de hasta 37.800 euros. Una medida que la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, no dudó en catalogar como contraproducente al entender que va a generar un impacto negativo con “nuevas subidas del precio de la vivienda”. Pero la gallega no fue la única en alzar la voz, ya que el diputado nacional Gerardo Pisarello la tildó como “un dinero público regalado a los bancos”.
La ampliación del puerto de València fue el primer capítulo de los reproches entre ambos socios
Podría pensarse que fue un calentón aislado, pero el reciente nombramiento de Carmen Calvo como presidenta del Consejo de Estado también provocó ayer las airadas quejas de la portavoz de feminismo y derechos LGTBI de Sumar, Elizabeth Duval, quien afeó la designación de la exvicepresidenta del gobierno al considerarla, entre otros, como la responsable de “obstaculizar con su transfobia la tramitación de la ley trans”.
Pero es que apenas 24 horas antes, esta vez en el plano internacional, Sumar se quejó formalmente ante el Ministerio de Defensa por el envío de munición a Israel pese a que el Gobierno había anunciado que tenía “suspendidas” desde octubre las exportaciones de armamento al país hebreo.
Estos hechos no amenazan de ninguna manera con hacer descarrilar la legislatura, pero sí que han venido a airear unas diferencias que, hasta ahora, Sumar había tratado de mantener soterradas. Así sucedió con la decisión unilateral del PSOE de pactar con el PP la ampliación del puerto de Valencia y con el anuncio realizado por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de acometer sendas ampliaciones de los aeropuertos de Madrid y Barcelona.
Pese a que los diferentes partidos del espacio confederal rechazan enérgicamente ese tipo de megainfraestructuras –al punto de haberlas incluido en sus respectivos programas electorales–, la dirección de Sumar optó por aplicar sordina a su malestar.
De hecho, su líder, Yolanda Díaz, evitó fijar ultimátum alguno con respecto de los proyectos de València, El Prat o Barajas a sabiendas de que la determinación del PSOE a acometerlos debilitaría a las primeras de cambio el papel de Sumar dentro del Gobierno. Y optó por una estrategia de “amplitud de miras” asegurando que simplemente se necesitaba consensuar “una orientación general sobre el debate de los presupuestos” teniendo en cuenta la situación de emergencia climática.
Pero lo cierto es que, con los de ayer, ya son cinco los desencuentros en los primeros dos meses de vida del Ejecutivo de coalición. Y eso que unos y otros se prometieron una cogobernanza menos tensionada que la registrada entre PSOE y Podemos en la legislatura anterior.
Asens para la lista de las europeas
La dirección de Catalunya en Comú ha ofrecido al expresidente del grupo parlamentario de Unidas Podemos, Jaume Asens, ser su candidato para las elecciones europeas del próximo 9 de junio. Asens, que estaba apartado de la primera línea política después de que su formación optara por Aina Vidal como candidata para los comicios generales del 23-J, estudia ahora la oferta.
De aceptarla, Asens tomaría el relevo del ahora ministro de Cultura del Gobierno, Ernest Urtasun, que dejó su rol como europarlamentario este verano para hacerse cargo de la cartera ministerial. En cualquier caso, la elección del candidato tendría que ratificarse en un proceso de primarias que el partido pondrá en marcha a finales de febrero. La elección de Asens no es una sorpresa. Pese a no ocupar cargo político alguno, el dirigente se ha mantenido estos meses en contacto directo con la política. Primero, acompañando a Yolanda Díaz en su visita a Puigdemont en Bruselas el pasado mes de septiembre, y posteriormente, siguiendo las negociaciones del PSOE y Junts para acordar la ley de Amnistía. Su designación por parte de los comunes se adelanta al proceso que tiene pendiente Sumar, que aún busca candidato.
La plataforma de Yolanda Díaz ha comenzado a sondear posibles nombres para enfrentarse a Podemos en junio, pero la decisión no se tomará hasta después de las elecciones gallegas. Los comunes confían en situar a Asens al menos entre los tres primeros puestos de la lista final de Sumar.