La derrota de Colau en Barcelona pasa factura a los comunes en toda Catalunya
Elecciones municipales 2023
En Comú empeora resultados con un 8,85% de los votos pese a la alianza con Podemos
La derrota de Ada Colau en Barcelona, tercera fuerza por detrás de Xavier Trias y Jaume Collboni, ha tenido sus réplicas en el conjunto de las candidaturas que se han presentado bajo el paraguas de En Comú en toda Catalunya. El proyecto político de los comunes sufre para afianzarse a nivel municipal fuera de la capital catalana y ni siquiera la alianza con Podemos, con quien sellaron una pacto para intentar evitar la fragmentación de voto del 2019, ha logrado impulsar sus resultados. Tampoco el apoyo de Yolanda Díaz, volcada en la campaña de los comunes desde el minuto uno con constantes apariciones en Catalunya.
Al contrario, los comunes y Podemos empeoran en estas municipales, con un 8,85% de los sufragios emitidos en el conjunto de municipios de Catalunya. El retroceso no llega a un punto de distancia frente a cuatro años atrás, apenas un 0,57. Pero es suficiente como para dejarse catorce concejales por el camino, con 244 ediles en total, un 5% menos de representantes municipales que en el 2019. Y lo más relevante: pierden fuelle en algunas de sus plazas históricas, la práctica totalidad, herencia de Iniciativa.
Pierden concejales en algunas de sus plazas históricas, como El Prat o Montcada
La competición con el PSC en el área metropolitana de Barcelona, su principal adversario en esta contienda electoral, les ha pasado factura. En Montcada i Reixac, donde Laura Campos ha gobernado los últimos ocho años, los comunes pasan de primera a segunda fuerza por detrás de los socialistas catalanes. Del 24,41% de los votos y siete concejales bajan al 22,25% y cinco ediles. En Sant Feliu de Llobregat, otro de sus bastiones (se partieron la alcaldía con ERC en el último ciclo) pasan de segunda a tercera candidatura más votadas, con el PSC y ERC por encima. En Castelldefels, donde se ha presentado Candela López, coordinadora nacional de Catalunya en Comú, también pierden votos y concejales. Y desaparecen de Santa Coloma de Gramenet al no llegar al 5% de votos. En el 2019 obtuvieron tres representantes en el ayuntamiento. Tampoco logran entrar en Girona y Terrassa, ciudades que también se les resistieron en las anteriores municipales. Y en Lleida pierden uno de los dos concejales con los que contaban.
Revalidan victoria en uno de sus feudos, El Prat de Llobregat, donde Lluís Mijoler vuelve a ser el candidato más votado. Se trata de una ciudad de gran relevancia extramunicipal, donde se juegan una de las grandes partidas políticas en torno a la posible ampliación del aeropuerto. Ahora bien, Mijoler también sale trasquilado de estas municipales. Si en el 2019 conseguía once concejales, mientras que Podemos lograba uno, ahora se queda con nueve.
Obtienen 244 ediles, catorce menos que en el 2019; la derrota en la capital catalana es un golpe difícil de digerir
Sí mejoran resultados, en cambio, en Santa Perpètua de la Mogoda, pasando de nueve a diez ediles y más de un punto de voto. Y doblan representación en Sabadell, con dos concejales.
El proyecto de los comunes queda, así, muy tocado. Los pactos que puedan surgir en las ciudades a partir de ahora serán cruciales para resistir y rearmarse. Pero por mucho que hagan de la necesidad virtud en los municipios, nada podría sustituir una eventual salida del gobierno municipal de Barcelona. La capital de Catalunya y Colau son el núcleo del partido. Y, a día de hoy, están más fuera que dentro de la sala de mandos de la plaza Sant Jaume.