Unidas Podemos pactó con Sánchez conservar sus carteras y su alineación
El nuevo Ejecutivo
El presidente abordó la remodelación con Díaz, que ratificó a todos los ministros
La gran remodelación del Ejecutivo no alcanza a los ministerios de Unidas Podemos. La única que se ve afectada es la vicepresidenta de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, al pasar a ser vicepresidenta segunda con la salida de Carmen Calvo. Que la crisis de Gobierno no afectara a las carteras de Unidas Podemos fue decisión expresa del espacio político, que reivindicó sus propios tiempos. El presidente Pedro Sánchez abordó con Yolanda Díaz su ambiciosa remodelación días atrás e invitó a la vicepresidenta a hacer algún cambio en la alineación de Unidas Podemos. Pero desde el espacio morado consideran que su propia crisis de Gobierno se produjo en marzo pasado, cuando Pablo Iglesias dejó el Ejecutivo, Díaz asumió la vicepresidencia y Ione Belarra se convirtió en ministra de Derechos Sociales. Las fuentes consultadas coinciden en que Sánchez no presionó, respetó la autonomía del espacio político e informó el viernes a Díaz sobre el alcance de la remodelación y de su acuerdo con las actuales carteras y titulares. Díaz expresó ayer en Twitter una valoración positiva de los cambios y el compromiso de todos con el mandato electoral del 2019.
En primer término los cinco ministros de Unidas Podemos
Sobre los nuevos nombramientos, desde Unidas Podemos prefieren ser prudentes y tampoco existe una prevención singular por el ascenso a la vicepresidencia primera de Nadia Calviño, con quien los ministros de Podemos han tenido no pocos tiras y afloja, porque creen que tanto su actitud como su capacidad para resistirse a algunas medidas no van a cambiar sustancialmente por el peldaño que asciende en el escalafón –o sea, que será el mismo dolor de cabeza para ellos que ha venido siendo desde su presidencia de la Comisión Delegada de Asuntos Económicos– y que, en todo caso, asciende un escalón a la vez que lo hace la propia Díaz.
Los aliados se muestran prudentes sobre los cambios y confían en la lealtad de todos al pacto de Gobierno
Hay, sin embargo, mucho interés en saber cómo se desempeñará la nueva ministra de Transporte, Movilidad y Agenda Urbana, Raquel Sánchez, respecto a la negociación pendiente de la ley de Vivienda. El motivo es que Raquel Sánchez es la alcaldesa de la localidad de Gavà, donde, por ser zona de precios tensionados, se está aplicando el control de alquileres de la ley catalana, que ha logrado una bajada de los precios del 8,3% en el primer año de aplicación.
Por otra parte, algunas fuentes del partido temen que el reforzamiento del PSOE orgánico –que en buena medida se opuso al pacto de coalición– dificulte el funcionamiento de la entente, en buena medida engrasada por la presencia del jefe de gabinete, Iván Redondo. Tampoco falta quienes interpretan la salida de Carmen Calvo como una victoria del femi-nismo, después de que la vice-presidenta primera mantuviera bloqueada durante meses la ley trans que impulsaban la ministra de Igualdad, Irene Montero, y el de Justicia, Juan Carlos Campo, y que finalmente pasó por el Consejo de Ministros hace dos semanas. Pero unos y otros, en el Gobierno como en los partidos, coinciden en que es pronto para leer el sentido de los cambios decididos por el presidente, tanto su intención como sus efectos y confían en la lealtad de todos al programa pactado en enero del 2020.