El catalanismo no independentista aboga por una “candidatura única”
Elecciones catalanas
La propuesta de Albert Batlle de liderar una confluencia de centro catalanista ha sido recibida con cautela
Suenan tambores electorales en Catalunya, pero con la fecha aún por concretar el espacio catalanista no independentista sigue tratando de encontrar una solución a su problema: la excesiva oferta. Lliures, la Lliga Democràtica, Convergents y Units per Avançar pueden considerarse cuatro recetas para lograr un mismo pastel que el actual teniente de alcalde de Seguretat del Ayuntamiento de Barcelona, Albert Batlle, está dispuesto a cocinar.
Su propuesta para liderar una confluencia de centro catalanista que impida que el independentismo gobierne, lanzada este domingo en una entrevista en La Vanguardia , ha sido recibida con cautela; en algún caso, como el del exconseller Antoni Fernández Teixidó, con caballeroso agradecimiento, pero con la idea común de ordenar tanta oferta y construir una “candidatura única”. En esto coinciden Lliures y la Lliga, la formación impulsada por el ex primer ministro francés Manuel Valls y Eva Parera. Pero el acuerdo no será fácil, antes habrá que aclarar el programa, y ahí la postura sobre la cuestión catalana presenta filos que limar. Teixidó lo tiene claro y prioriza dejar claro la “confusión” existente en este espacio sobre la independencia, y despejar que “no estamos a favor”. Apuesta por hacer posible “una nueva aritmética parlamentaria contra el independentismo”, al tiempo que reclama “no poner líneas rojas a nadie”.
Lliures agradece la propuesta “personal” de Batlle, y la Lliga rechaza personalismos o exclusiones
Lliures coincide en que el panorama del centro catalanista está demasiado atomizado y que todas las ofertas separadas son insuficientes, por tanto entiende que la de Batlle es tan solo una apuesta “personal arropada por Units per Avançar”.
Desde la Lliga amplían el marco ideológico dibujado por Teixidó y reafirman su “mano tendida sin exclusiones a los compañeros” de Lliures, de Convergents, de Units per Avançar y del recién fundado Partit Nacionalista de Catalunya (PNC). Así que las diferencias son de calado y han provocado que Lliures haya frenado su alianza prevista con la Lliga para tejer una “gran coalición de centristas y catalanistas”.
La Lliga no se pronuncia sobre la propuesta de Batlle, pero rechaza “la confrontación, el personalismo o la exclusión” y recetan unidad generosidad. Tampoco lo valoran el resto de posibles implicados en esta lid, como el PNC o el PSC.