El TSJC suspende el juicio a la Mesa del Parlament del 1-O por el inminente aforamiento de Nuet

La Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Catalunya (TSJC) ha decidido suspender el juicio a la Mesa del Parlament por desobediencia en relación al 1-O que estaba ya señalado para los próximos 28 y 29 de noviembre, y 3 y 4 de diciembre. El motivo es que uno de los encausados, Joan Josep Nuet, será elegido próximamente diputado del Congreso por ERC, como consecuencia de los resultados de las últimas elecciones generales, una circunstancia que hará que adquiera la condición de aforado y deba ser juzgado en el Tribunal Supremo. Está por ver si por tanto la causa vuelve al alto tribunal, que fue quien separó la pieza separada y la remitió al TSJC.

En una providencia con fecha de este miércoles, el tribunal catalán establece que la sala segunda del Tribunal Supremo, sea quien oiga “a las partes sobre las consecuencias que dicho acontecimiento pueda tener”, y “dictar, en su caso, la correspondiente sentencia, previsiblemente con posterioridad” a que Nuet adquiera su condición de diputado.

La fecha del juicio ya ha recibido alteraciones

La decisión de la sala que preside Jesús María Barrientos, se produce después de que la Junta Electoral de Barcelona haya notificado este miércoles al TSJC la elección de Nuet, por la que “adquirirá previsiblemente y en tiempo breve, de forma sobrevenida”, la condición de aforado.

La sala abre ahora un plazo de cinco días hábiles para escuchar las posiciones del fiscal y a las demás partes, acusaciones y defensas, respecto a las consecuencias que pueda tener la elección de Nuet sobre la competencia del TSJC para enjuiciar los hechos. Y es que el aforamiento del exmiembro de la Mesa puede provocar que la causa se dirima por entero en el Supremo.

Camino de ida y vuelta

Los seis fueron procesados por el Tribunal Supremo, pero remitió la causa al TSJC para que se juzgara en Barcelona. Ahora puede volver al Supremo

Junto a Nuet deberán sentarse en el banquillo de los acusados Anna Simó (ERC), Simona Barrufet, Lluís Corominas, Lluís Guinó (JxSí) y la exdiputada de la CUP Mireia Boya. El TSJC apreció pruebas que son “indiciariamente constitutivas de un delito” después de ser procesados inicialmente por el Tribunal Supremo. Los seis debían ser juzgados inicialmente por el alto tribunal junto con los acusados de rebelión y malversación, pero finalmente el Supremo decidió separar esta parte de la causa y enviarla al TSJC para que se juzgara en Barcelona.

Además, no es la primera vez que la fecha de esta juicio se ve alterado. El 27 de septiembre, el TSJC lo fijó para entre el 19 y el 22 de noviembre. La causa de Vox contra los exdiputados quedó alterada una semana después porque en las fechas previstas, dos de los abogados tienen “señalamientos prioritarios por ser causas con preso”.

Los seis están acusados de un delito continuado de desobediencia y, en su caso, de un delito de organización criminal, por desoír la órdenes del Tribunal Constitucional (TC) que les obligaban a impedir la tramitación de cualquier iniciativa que supusiera desplegar la hoja de ruta unilateral independentista, plasmada en la declaración de ruptura que el Parlament aprobó el 9 de noviembre de 2015, como las leyes del referéndum y de transitoriedad jurídica.