Pedro Sánchez recibió anoche el encargo del Rey de presentarse a la investidura . Descartada la posibilidad de lograr la mayoría en la primera ronda, los ojos del presidente en funciones miran ya hacia la segunda votación, en la que le bastarían más votos positivos que negativos. Una posibilidad que ayer se hizo más viable al conocerse que los cuatro diputados independentistas suspendidos no renunciarán a su acta. Se rebaja así el quórum a 346 escaños.
La portavoz de JxCat, Laura Borràs, confirmó tras su entrevista con Felipe VI que Jordi Turull, Josep Rull y Jordi Sànchez mantendrán sus actas como diputados electos a pesar de la suspensión. La formación de Carles Puigdemont obtuvo siete escaños en las pasadas elecciones, pero esta decisión reduce a solo cuatro sus votos en el Congreso de los Diputados. Falta saber qué hará Oriol Junqueras (ERC).
Tendrá que negociar
Sánchez podría reunir hasta 175 síes
Toca sacar la calculadora para sumar quiénes podrían darle un sí a Pedro Sánchez. Obviamente cuenta con los 123 escaños que cosechó el PSOE en las elecciones del 28 de abril. A estos, previsiblemente, se les podrían añadir los 42 de Unidas Podemos. Entre los dos suman 165 síes. La tarea del líder socialista estos días será intentar llegar a acuerdos con los partidos que no le han dado un no profundo: Unión del Pueblo Navarro (2), Compromís (1), PNV (6) y PRC (1). La mayoría en segunda votación, con la nueva aritmética que posibilita JxCat, se lograría con 174 síes y de conseguir estos acuerdos Sánchez tendría 175.
Cada partido regionalista le ha puesto, de momento, precio a sus votos afirmativos a Sánchez. Los cántabros quieren que el AVE llegue a su tierra, UPN haría una abstención por abstención para Gobernar en Navarra, Compromís reclama un cambio en la financiación autonómica y el PNV exige que no haya pactos entre PSOE y Cs.
Unir los votos en contra al secretario general del PSOE supone hacer una cadena de 66 diputados del PP, 57 de Ciudadanos y 24 de Vox, lo que ya coloca los noes en 147. ERC, 14 (sin Junqueras); Coalición Canaria, 2; JxCat, 4 (sin los tres presos); y Bildu, 4, alargan la cadena del rechazo a 171 noes. Y es entonces cuando los focos se detienen en los dos diputados de la coalición Navarra Suma, que formaron para el 28A y el 26M UPN, Cs y PP. La posibilidad de que estos dos parlamentarios se abstengan hacen a Sánchez presidente y, si se decantan por el no, se producirá un empate a 173.
Semejante especulación realza la trascendencia de lo que haga Junqueras con su acta, pues si renuncia a ella para recalar en el Parlamento europeo y le sustituye en el Congreso otro electo de ERC, la horquilla del no se elevaría un poco a los 174 votos en contra y Sánchez no sería presidente.
Así que la investidura del líder del PSOE depende en este momento de Navarra, siempre y cuando se asegure los síes mencionados antes. Otra opción, ahora mismo remota, es que los socialistas negocien una abstención global en el espectro nacionalista e independentista de la cámara. De hecho, Bildu tampoco había descartado ayer la abstención.