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El exsecretario de Seguridad, en la lupa del juez del caso Villarejo

Posible implicación

Un comisario declara que dio a Francisco Martínez información robada a Bárcenas

Francisco Martínez, en el centro, en una imagen del 2014

Dani Duch

El juez de la Audiencia Nacional Manuel García Castellón va a tirar del hilo para conocer la posible implicación del exsecretario de Estado de Seguridad Francisco Martínez en la operación parapolicial para robar información al extesorero del Partido Popular Luis Bárcenas. Ya ha dado el primer paso, encargando a la unidad de asuntos internos de la Policía Nacional que tomen una serie de declaraciones.

Uno de los comisarios implicados en el caso Villarejo, Enrique García Castaño, alias el Gordo, ha decidido tirar de la manta ante el temor de que el instructor pueda ordenar su ingreso en prisión. Para evitarlo ha empezado a colaborar de algún modo con la justicia y el martes reconoció en sede judicial que él mismo había entregado un lápiz de memoria con información robada de Bárcenas a quien era en esos momentos mano derecha del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz.

El policía García Castaño tira de la manta ante el temor de que el instructor le envíe a la cárcel

Según ha podido saber La Vanguardia de fuentes jurídicas, el relato del Gordo es que el chófer de Bárcenas, Sergio Ríos, también investigado en esta causa, fue captado por la Policía para que se hiciera de manera ilegal con información del extesorero del Partido Popular, cuando este había declarado la guerra al entonces presidente del gobierno Mariano Rajoy por no protegerle de una imputación por el caso Gürtel.

La versión de García Castaño, siempre según estas fuentes, es que el chófer se hizo con el teléfono móvil de Bárcenas y de su esposa, Rosalía Iglesias, y se citó con este comisario que llevaba con él a dos agentes de la unidad central de apoyo operativo (UCAO).

Se vieron en una cafetería en Madrid y allí mismo los dos agentes se descargaron el contenido del teléfono de Bárcenas e Iglesias. El chófer se llevó de nuevo los dos terminales mientras que la información de sus teléfonos fue grabada en un disco duro. Según la versión ofrecida ante el juez de la Audiencia Nacional, el comisario fue quien entregó en mano a Martínez el pen drive con toda la información.

El juez tiene abierta una pieza llamada Kitchen sobre un operativo montado desde dentro de la Policía y supuestamente por órdenes del Ministerio del Interior para sustraer información de casa de Bárcenas que pudiera hacer daño a Rajoy. El magistrado quiere saber ahora si la versión ofrecida por el Gordo es válida. No se puede dejar de lado que es uno de los principales investigados por presuntamente haber cobrado grandes cantidades de dinero por parte del excomisario José Manuel Villarejo a cambio de ofrecerle información confidencial y reservada para venderla a terceras personas.

De ahí que el instructor haya requerido a la unidad de asuntos internos de la Policía, encargada de la investigación, que cite como testigos a los dos agentes que supuestamente hicieron el clonado de los teléfonos. Si la versión de García Castaño es cierta, el magistrado pondrá su mirada en el exsecretario de Estado.

En otro proceso judicial, Martínez salió salpicado por su presunta relación con Villarejo. Asuntos internos localizó varias llamadas suyas al comisario actualmente en prisión el mismo día que detuvieron a Francisco Nicolás Gómez Iglesias, más conocido como el pequeño Nicolás.

La sospecha era que el dirigente del PP alertó a Villarejo del arresto porque el entonces comisario tenía relación con el joven investigado por hacerse pasar por miembro de los servicios de inteligencia. Concretamente, el exsecretario de Estado llamó en dos ocasiones a Villarejo el día de la detención, el 14 de octubre del 2014, y una de las veces fue mientras se realizaba el registro en el domicilio del joven. Además, se localizaron en días posteriores más llamadas, una de ellas coincidiendo con una entrevista que había salido publicada al pequeño Nicolás. Además, de la investigación de la Audiencia Nacional se desprende que ambos tenían una relación fluida mientras este fue el número dos de Interior.