* El autor forma parte de la comunidad de lectores de La Vanguardia
Al lado de la Riera de Clarà, en el término municipal de Casserres, en el Berguedà, encontramos la majestuosa y poco conocida Balma de les Mules, que nos transporta hasta la prehistoria, al Paleolítico, a la Edad de los Metales.
Según el Inventari del Patrimoni Arqueològic de Catalunya, aún no se ha realizado ninguna excavación arqueológica que permita identificar mejor la tipología del yacimiento ni su marco cronológico.
La inmensidad de la Balma de les Mules.
Las grutas o baumas son cavidades alargadas y no muy profundas recortadas por la erosión del agua en un risco o vertiente rocosa donde penetra la claridad, que facilitan, en ausencia de cavidades o cuevas, la protección para el ser humano.
Balma de les Mules.
En este caso, vemos en estas fotografías en Las Fotos de los Lectores de La Vanguardia, una cueva de grandes dimensiones, con más de 50 metros de longitud, y una altura media de un metro. Superpuesto a varias capas de cantos rodados, es visible frente a la gruta la presencia de restos de un estrato de color rojizo, compuesto de tierra quemada y cubierto por otro estrato de cenizas.
Su formación es el resultado de un largo proceso erosivo que se inició hace 500 millones de años en la Depresión Central que entonces ocupaba los contrafuertes de la Cordillera Herciana de donde formaba parte el antiguo Macizo del Ebro.
Durante millones de años los ríos fueron erosionando esta vieja cordillera aportando hacia el mar una gran cantidad de material, hasta que ésta desapareció. Las tierras que forman el Alt y el Baix Berguedà quedaron sumergidas por el mar y en el fondo se fueron depositando capas de sedimentos que se consolidaron hasta convertirse en roca.
Marcas en la roca de la Balma de les Mules.
Hace 70 millones de años aproximadamente, como resultado del movimiento de la tectónica de placas, el fondo rocoso de este mar recibió una presión muy fuerte hasta hacer emerger lo que conocemos como el Alt Berguedà y, por tanto, el mar se fue retirando dejando sólo cubierta por las aguas la comarca del Baix Berguedà.
Rocas de la Balma de les Mules.
El proceso erosivo de las rocas del Alt Berguedà se inició de nuevo y al igual que con el Macizo del Ebro, los ríos arrancaron, transportaron y depositaron los sedimentos en el mar del Baix Berguedà, hasta que hace cinco millones de años este mar residual, empezó a retroceder hasta desaparecer.
Los agentes erosivos en estos últimos millones de años han configurado el paisaje actual, que podemos apreciar en estas imágenes.
La huella de la erosión en la Balma de les Mules.
¡Participa!
¿Quieres mostrar tus fotografías?
Los interesados en participar en Las Fotos de los Lectores tan solo deben escribir un email a la dirección de correo de nuestra sección de Participación (participacion@lavanguardia.es) adjuntando la fotografía, explicando detalles de cómo y dónde fue tomada y aportando los datos del autor para la firma de la imagen. Es importante indicar en el asunto del correo: ´Fotos de los Lectores´.