A los nuevos responsables del Ayuntamiento de Barcelona les pido que intenten poner fin al desaguisado circulatorio del cruce de Rosselló con Pau Claris. Sobrepasar ese enclave puede llegar a representar hasta 20 minutos desde el paseo de Gràcia. Entre otros, turistas que van de la Pedrera en dirección a la Sagrada Família colapsan la circulación con autocares y buses turísticos. Nada ayuda la poca sincronización del semáforo que hay en la Diagonal. Y otro aspecto que perjudica el tráfico es el paso de peatones de Pau Claris tan pegado a Rosselló, ya que solo deja margen a un coche para girar. Una solución sería trasladar unos pocos metros más abajo el paso de peatones y poner vallas al inicio para que no se pueda cruzar. Eso permitiría pasar a cuatro o cinco coches para girar y descongestionar el cruce.
Xavier Castillo
Vilassar de Mar