Nueve de cada diez lectores que hasta el momento han aportado su opinión consideran que aumenta la inestabilidad en los países de América Latina.
Hay varias factores que avivan este debeta, como las protestas en Ecuador, Bolivia o Chile; tensiones en Venezuela o Colombia; la crisis del Amazonas o las elecciones en Argentina abren el debate sobre la inestabilidad del continente.
Se habla de la crisis del milagro neoliberal o de cómo organismos internacionales como el FMI pierden pie en Latinoamérica, donde, por ejemplo, argentinos y ecuatorianos rechazan las recetas de austeridad que recomienda el Fondo Monetario Internacional. Y, en Argentina, en pleno proceso de elecciones.
En ocasiones son precisamente las sospechas de posibles fraudes electorales las que ocasionan el malestar de la población, harta de los casos de corrupción, como es el caso de los bolivianos.
Entretanto, no solo hay tensiones internas en países como Venezuela, sino que hay disputas entre diferentes países, como los venezolanos con los colombianos o con los ecuatorianos.
Todo ello precedido de unos últimos meses en que el Brasil de Jair Bolsonaro ha estado en el ojo del huracán por los incendios en el Amazonas, entre otras polémicas que han afectado al mandatario brasileño.