La presidenta ha cancelado sus compromisos exteriores durante las dos primeras semanas de enero. Tiene una neumonía grave”. El comunicado que ayer realizó el portavoz de la Comisión Europea, Stefan de Keersmaecker, sobre la suspensión de la agenda de Ursula von der Leyen causó sorpresa y alarma en Bruselas. Especialmente porque estos días la presidenta del Ejecutivo comunitario había mantenido su actividad habitual a través de las redes sociales, en las que había condenado el atentado de Nueva Orleans y había celebrado tanto el trigésimo aniversario del ingreso de Austria, Finlandia y Suecia en la Unión Europea como el inicio de la presidencia de turno de Polonia en el Consejo Europeo.
A sus 66 años, Von der Leyen ha decidido seguir a rajatabla la recomendación de sus médicos para superar esta afección pulmonar, aunque para ello deba cancelar estos días su presencia en Lisboa y una visita a Gdansk. Su objetivo es regresar con fuerzas para afrontar su nuevo mandato.