Feliz ‘overbooking’

Feliz ‘overbooking’

Que la compañía aérea te deje tirado en el aeropuerto con todo pagado, hoteles y entradas incluidas, y toda Roma esperándote no es nada comparado con unas elecciones o con la bajada de la inflación. No es nada comparado con una guerra que sigue. Nada comparado con las muertes por calor. Que te dejen tirado, decíamos, es una nimiedad a menos que pierdas la dignidad, además de tus vacaciones.

El overbooking nuestro de cada día de verano ha vuelto, si es que alguna vez se fue. Cuando dimos la bienvenida a la democratización del hecho de viajar aceptamos a la chita callando el maltrato de las compañías low cost, aunque de low solo conserven el nombre . Hay abuso. Hace tiempo que volar dejó de ser cosa de ricos para convertirse en cosa de pringados si no puedes permitirte una tarifa premium, plus, prime o excellent.

Xavier Cervera

 

Xavier Cervera

El caso es que los del mogollón estamos condenados a que las aerolíneas jueguen con nosotros al pito pito gorgorito. “Te-ha-to-ca-do”. Porque te acabará tocando. Y no veas lo mal que sienta que la lotería te incluya a ti o a los tuyos un día equis de julio o agosto, llevando en una maleta diminuta toda la ilusión del mundo. Diminuta, sí, porque de lo contrario superará el peso máximo admitido y encima te cobrarán un recargo de 60 euros. Otro más.

Resulta gracioso que estos días las webs de diarios y revistas no dejen de publicar artículos sobre cómo reclamar si eres víctima del overbooking. Nada despierta más el instinto asesino que bregar con el bot del número 900. Te invita con voz dulce a pulsar 1, 2, 3 hasta 10 para acabar derivándote... a la página web de la compañía. No sé si es peor ese bot o ser atendido (es un decir) por una persona humana o algo que se le parece en el mostrador de reclamaciones del aeropuerto. Con todo el respeto por un trabajo seguro que mal pagado, les pediría a esos empleados un poquito de por favor. Es increíble la habilidad que ha desarrollado esta gente para responder a tu indignación con un “eso yo no lo sé”.

Cero información, cero personal, cero decencia. Ahora ya sabemos lo que es que te traten como ganado. Todo legal y muy pero que muy democrático. Feliz vuelo. O no.

Lee también
Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...