Dos segundos sin beso

Dos segundos sin beso

El 13 de abril del 2013 un matrimonio tailandés estuvo besándose en la boca durante 58 horas, 35 minutos y 58 segundos. Intrigan esos dos segundos hasta completar el minuto 36 que no pudieron soportar seguir besándose.

Uno de los momentos más recordados de la entrega de premios en 2003, cuando Adrien Bordy dio un beso de cine a Halle Berry

 

LV

En los besos que uno corta antes de tiempo está el principio del fin. Porque en los besos apasionados o los besos de amor no piensas en nada que no sea bailar sin pisar al otro. Cierras los ojos, no piensas, besas y ya está. Pero es imposible no pensar en nada, tener los ojos cerrados, bailar sin moverte durante 58 horas, 35 minutos y 58 segundos.

En los besos que uno alarga o que le aguantan está el fin del principio. Hay ese momento aterrador del buceador que se topa con el tiburón que es abrir los ojos y comprobar que el otro ya los tiene abiertos. Y es que los besos no engañan. Si te besan mal, aquello está yendo mal, va mal, irá mal. Si te besan bien, tampoco es seguridad de nada respecto de que la relación te convenga, pero al menos es la intuición la que te señala la caída al abismo y luego, ya en el desastre, siempre puedes alegar intuición como eximente del artículo 20 del Código Penal.

En los besos que uno alarga o que le aguantan está el fin del principio

Seguro que el matrimonio tailandés cuando dejaron de besarse y vieron que les quedaban un par de segundos de beso para que cayera otro minuto, se preguntaron qué les había pasado. Pero si lo hicieron, sabían de sobras la respuesta: lo tuvimos Jim, pero ya no lo tenemos.

Qué hicieron ya despegados, después de esas 58 horas, 35 minutos y 58 segundos. ¿Volvieron a su vida de pareja como si no hubieran estado más de dos días cosidos el uno en la boca del otro? Quiero pensar que, terminado el beso de hartazgo, cansancio, quién sabe si ternura, se rehuyeron, atemorizados con la sola idea de que el otro quisiera recuperar esos dos segundos de beso que no se dieron. Esos dos segundos que les dijeron que lo suyo solo era récord.

Lee también
Mostrar comentarios
Cargando siguiente contenido...