La huelga indefinida convocada por los secretarios judiciales en toda España encara ya su cuarta semana sin visos de acuerdo entre los portavoces del colectivo y el Ministerio de Justicia. Pocas huelgas pasan tan desapercibidas pero a la vez son tan efectivas como esta, ya que la repercusión en la ciudadanía es muy alta. Los letrados de la administración de la justicia tienen la llave de la práctica totalidad de procesos judiciales. También son los responsables de toda la documentación de esas oficinas, que prácticamente dirigen. Su firma se necesita para abonar indemnizaciones laborales, el pago de pensiones de alimentos, registros policiales, compensaciones por accidentes, ratificar una boda. Su papel es clave, hasta el punto de que en estas semanas de paro han quedado bloqueados 560 millones de euros en litigios, dinero que deberían recibir ciudadanos afectados, y se han suspendido 152.000 procesos.
Urge que ambas partes alcancen un acuerdo, aunque sea con cesiones. No es de recibo que un conflicto laboral acabe laminando derechos de los ciudadanos.