La increíble historia de Robin, una zarigüeya atravesada por una flecha
Crueldad humana
El animal ha sobrevivido a esta acción cruel ante la admiración de sus cuidadores
Cuando tienes que escribir sobre este tipo de historias, nunca sabes quién de los protagonistas es realmente el animal y quién el ser humano. La imagen de la zarigüeya atravesada por una flecha no puede dejar a nadie indiferente, por citar un adjetivo suave, en otra acción salvaje protagonizada por un hombre y que estuvo a punto de acabar con la vida del animal. Es más que probable que si la zarigüeya hubiera fallecido jamás hubiéramos podido explicar esta historia y la acción cruel no tendría la repercusión que ha generado en las redes. Por suerte, no ha sido así. Este es el relato de Robin, un símbolo de supervivencia que esconde un relato más humano que animal.
Las autoridades del condado de Riverside, en California, fueron alertadas el pasado viernes del increíble hallazgo. No daban crédito a lo que veían, especialmente por la brutalidad de la acción. Una zarigüeya apareció moribunda alcanzada por dos flechas, una en la cabeza y otra en su pequeño cuerpo. El Servicio de Animales de ese condado ya la daban por muerta pero, sorprendentemente, se percataron de que el animal todavía respiraba así que decidieron actuar con rapidez y llevársela hacia la clínica.
El deseo de la zarigüeya por vivir se estaba imponiendo a sus brutales heridas. Uno de los sargentos que la atendió aseguró que “se notaba que el animal luchaba internamente por eliminar el dolor que le producían las dos flechas, una en su cuerpo y otro en el rostro”. Inmediatamente, se decidió hacerle una intervención quirúrgica de emergencia para poder eliminar las flechas de su cuerpo, algo que finalmente se logró tras una operación larga y costosa.
De forma asombrosa, los rayos X determinaron que las heridas internas del animal no eran tan graves como parecían, por lo que no se temía por su vida. Eso sí, el cirujano se vio obligado a extirparle el ojo izquierdo a la pequeña zarigüeya, que el equipo médico decidió bautizar con el nombre de Robin. La idea es que el pequeño animal esté unos días más recuperándose en el hospital veterinario para ver cómo responde hasta que pueda ser entregado a un rehabilitador para que lo prepare para devolverlo a la naturaleza en cuanto sea posible.
Paralelamente, el servicio animal del condado ya trabaja con la policía de la zona en la investigación para encontrar a la persona responsable de tan salvaje agresión, por lo que también se ha pedido ayuda a los vecinos de la zona. Los autoridades hablan de “un acto enfermizo que no se puede volver a repetir”, por lo que premian cualquier información que se pueda tener. Robin, un superviviente nato, es el protagonista de una historia que se ha hecho viral y que, esperemos, sirva para concienciar a la sociedad sobre las lecciones que nos suelen dar cada día protagonistas que, a priori, deberían ser más animales que nosotros. Casos como este demuestran que todavía estamos muy lejos.