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La desconocida joya del automovilismo británico de los años 60

Un lugar en la historia

Se trata del Austin-Healey 3000, un roadster clásico al más puro estilo inglés

El modelo 3000 se fabricó entre los años 1959 y 1967, incluyendo variantes Mark I, II y III.

RM Sotheby's

Los vehículos de la firma Austin-Healey son la encarnación del verdadero automóvil deportivo británico de las décadas de los 50 y 60 del siglo pasado, una época en que aquella industria automotriz ocupaba una posición realmente importante en el escenario mundial. El modelo 3000 se fabricó entre 1959 y 1967, y es un coche que todos los entusiastas de los auténticos roadster al más puro estilo inglés deben conocer.

Cuando se lanzó, supuso un paso al frente en lo que se refiere a caballaje con respecto a los TR3 y el TR4 de Triumph pero por debajo del Jaguar XK-E, más caro y más potente. El primer 3000 incluía frenos de disco delanteros y un motor de seis cilindros en línea de 2.9 litros que desarrollaba unos 124 CV.

Austin-Healey 3000, la desconocida joya del automovilismo británico de los años 60.

RM Sotheby's

En cuanto al mundo de la competición, el Austin-Healey 3000 se consolidó como una alternativa de éxito y se forjó un nombre cuando uno de ellos logró la victoria en la clasificación general del exigente Rally Lieja-Roma-Lieja en el año 1960, para muchos considerado como el rally más duro de aquella época en nuestro continente.

Para todos los gustos

Este emblemático roadster se comercializó como biplaza y también en alternativa 2+2

Aquel año, un recorrido de unos 3.500 km atravesó sinuosas carreteras de montaña cruzando Alemania, Austria, Italia y la antigua Yugoslavia. Para hacernos una idea de su dureza, de los 90 participantes iniciales, solo 13 terminaron la competición. La piloto ganadora fue Pat Moss (hermana del también piloto Stirling Moss), acompañada por su copiloto Ann Wisdom y a bordo de su 3000.

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Otros dos Austin-Healey quedaron en segundo y tercer lugar aquel año, lo que supuso un triplete para el fabricante que consolidó la relevancia de la marca en el mundo del automovilismo de aquella década. El 3000 incluyó versiones Mark I, II y III a lo largo de sus años de producción. Todos los coches Mark I eran roadsters, disponibles como biplazas y en configuración 2+2, ambos de dimensiones idénticas.

Austin-Healey 3000, la desconocida joya del automovilismo británico de los años 60.

RM Sotheby's

El coche no ofrecía muchos guiños al confort de los ocupantes, pero poco importaba eso a la mayoría de propietarios de este deportivo, atraídos sobre todo por su diseño y por su comportamiento dinámico. En el año 1964, la variante Mark III como la que puedes ver en las fotografías aportaba 150 CV de potencia y era capaz de rodar a 195 km/h.

Dos grandes bazas

Sus entusiastas se sentían atraídos por su diseño y su comportamiento dinámico

Con su motor de seis cilindros en línea, caja de cambios manual de cuatro velocidades y una carrocería clásica inconfundible, esta variante fue especialmente popular en Estados Unidos, donde acabaron exportados la mayoría de sus ejemplares.

Austin-Healey 3000, la desconocida joya del automovilismo británico de los años 60.

RM Sotheby's

En cuanto al valor de estas unidades hoy en día, cabe señalar que si se encuentran en buen estado pueden llegar a pagarse hasta 125.000 euros. 

Austin-Healey 3000, la desconocida joya del automovilismo británico de los años 60.

RM Sotheby's

Si te interesa disfrutar del emblemático automóvil británico en plena acción (en este caso, un 3000 Mark II de 1963), solo tienes que echar un vistazo al vídeo que acompaña este artículo.