¿Por qué la gasolina y el diésel más caros no son siempre mejores para tu coche?
Combustibles distintos
El precio de los carburantes está disparado, por lo que es más importante que nunca elegir el adecuado para no malgastar el dinero
Las mejores tarjetas para repostar gasolina o gasóleo: ¿Cómo ahorrar en el precio del carburante?
Surtidores de distintos combustibles en una gasolinera
Llenar el depósito se ha convertido en un verdadero dolor de cabeza para muchos conductores. El pasado verano se alcanzó el pico máximo de los precios de los carburantes, que llegaron a superar los 2 euros el litro. La bonificación de 20 céntimos por litro que aplican el Gobierno y las petroleras rebaja el golpe, pero en muchas ocasiones resulta insuficiente. Con tal aumento, es necesario fijarse más que nunca en qué combustible elegir para el coche y no perder dinero.
¿Qué combustibles encontramos?
Cuando llegamos a un surtidor solemos encontrar los cuatro tipos de combustibles más habituales: la gasolina 95, la gasolina 98, el diésel normal y el diésel “plus” o “premium”. Con esta variedad es fácil tener dudas sobre cuál es el apropiado para cada vehículo o cuál conviene emplear teniendo en cuenta la relación calidad-precio. Y es que la primera diferencia que se percibe entre los distintos tipos y variedades de carburantes es su coste.
También hay estaciones, conocidas como “low cost”, que ofrecen carburantes más baratos. El truco está en que no suelen añadir aditivos específicos como sí hacen las compañías habituales. Se han convertido en muy populares en los últimos tiempos a raíz del incremento en el precio de los combustibles, aunque suelen generar debate sobre si son perjudiciales o no para los vehículos.
El recibo de una gasolinera 'low cost' suele ser mucho más barato que en otra gasolinera
De hecho, un estudio reciente de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) desvela que decantarse por la gasolinera más barata puede suponer un ahorro de hasta un 10% a la hora de repostar. Sin embargo, hay otras características que son particulares en cada combustible y a las que se debe prestar especial atención. Y no, utilizar el carburante más caro no es siempre la mejor opción.
¿Gasolina 95 o 98?
Las gasolineras suelen ofrecer gasolina 95 y 98
Si nuestro vehículo usa gasolina, tenemos dos opciones que se diferencian por su octanaje: la 95 y la 98. El índice de octano, como también se conoce, “indica la resistencia a la detonación del carburante cuando se comprime dentro del cilindro de un motor”, señala el Real Automóvil Club de España (RACE). De este modo, a mayor octanaje, mayor capacidad de compresión del motor. Actualmente, la distancia entre el precio de ambas está entorno a los 15 céntimos por litro, lo que supone 7,5 euros de diferencia al llenar un depósito de 50 litros.
En el proceso de desarrollo, los fabricantes realizan numerosas pruebas para lograr el mejor rendimiento posible del motor en combinación con la eficiencia, sus emisiones y consumos. En ese momento se compara la gasolina de octanaje 95 con la de 98 para determinar cuál de las dos es más apropiada para que el motor alcance un rendimiento óptimo. Por lo tanto, se debe repostar exactamente la que indique el fabricante, ya sea en el manual del vehículo o en la misma tapa del depósito.
La gasolina 95 es la más económica
Si el fabricante indica utilizar gasolina 95 (la más económica), poner de 98 octanos “no tendrá ningún beneficio para el motor” explica la Dirección General de Tráfico (DGT) en su Revista Interactiva del mes de junio. Y viceversa. Utilizar gasolina 95 en un motor preparado para 98 aumenta los consumos y emisiones al verse alterados los parámetros prefijados de la centralita ECU, detalla Tráfico.
En alguna ocasión es probable que, sea por error o porque no había de la otra, hayamos recargado gasolina del octanaje que no corresponde a nuestro vehículo. No hay ningún problema en mezclar gasolinas de 95 y 98 puntualmente, aunque si se hace de manera habitual puede terminar perjudicando el funcionamiento del motor. Tampoco tiene sentido aquello de repostar gasolina 98 de vez en cuando para limpiar el sistema de alimentación y de inyección, como seguro hemos escuchado alguna vez, ya que hoy en día ambas gasolinas cuentan con los mismos estándares de calidad.
¿Diésel normal o premium?
Una persona reposta el coche con diésel
En cuanto al diésel, la diferencia de precio entre el normal y el premium (el más caro) oscila entorno a los 10 céntimos por litro. O lo que es lo mismo, 5 euros por cada 50 litros. Su principal desemejanza radica en la cantidad de cetano que contiene cada uno. Ambos cumplen con los mínimos establecidos en la normativa. Sin embargo, como mayor es la proporción de cetano, menor es el tiempo entre la inyección del gasóleo y el comienzo de la combustión, lo que mejora el rendimiento.
Para plasmarlo en un ejemplo, el diésel premium es más eficaz especialmente cuando el motor arranca estando frío. Además, “contiene menos azufre e incorpora aditivos con propiedades anticorrosión”, dice la DGT, lo que alarga levemente la vida útil del motor. No obstante, como hemos comentado con la gasolina, es más que recomendable utilizar el gasóleo que indique el fabricante del vehículo, ya que en caso contrario podemos estar malgastando el dinero.