Todo lo que debes saber antes de viajar en caravana
Guía práctica
Este vehículo nos permite contar una segunda vivienda móvil, pero existen varios aspectos que hay tener en cuenta antes de lanzarse a la carretera
Los usuarios del caravaning en España se han caracterizado por su afición a la caravana, un vehículo menos recurrente en los países del norte pero todavía presente. Esta casa con ruedas permite gozar de una segunda vivienda donde queramos, en función de la temporada o nuestros gustos. Para introducirnos en este mundo de la acampada es necesario tener en cuenta algunos aspectos, tanto antes como después de la compra de una caravana.
El catálogo de modelos a nuestra disposición es casi infinito, así que podemos volvernos locos si no tenemos algunas pautas previas antes de empezar a buscar. Lo primero es lo primero: ¿Qué tipo de caravana puedo remolcar? Eso dependerá, en muchos casos, del turismo aparcado en el garaje. En este artículo os hablamos de los mejores coches para remolcar una caravana.
Los coches tienen una Masa Máxima Remolcable -MMR- con freno, la cual no se podrá rebasar en ningún caso. Un truco es mirar la Masa Máxima Autorizada -MMA-, que también aparece en la ficha técnica, y calcular que el remolque no supere el 80% del peso del coche en vacío. Por ese motivo los modelos de caravanas de menos de 750 kilogramos tienen tanto éxito.
Con el carnet B de conducir no podremos cargar con una unidad que suponga superar los 4.250 kg entre el coche y la caravana. Y en el caso de pesar más, necesitamos el carnet B96.
¿Qué caravanas existen?
Las tendencias entre los caravanistas evolucionan cada cierto tiempo. Por ejemplo, las minicaravanas son ahora más protagonistas que nunca en el mercado, sin llegar a ser la elección prioritaria. Su minúsculo habitáculo nos obligará a vivir con lo justo y necesario, conectando de manera más especial con el viaje, el entorno y la aventura. Además, no necesitarán matriculación propia al pesar menos de 750 kilogramos.
No tenemos que irnos a los "huevos" para hablar de caravanas (pocas) por debajo de los 750 kg. También las hay con cocina, baño y todo lo necesario en su interior. Este tipo de casas con ruedas están homologadas como remolque ligero y deberemos notificar su existencia a nuestra aseguradora, sin necesidad de sacar una póliza exclusiva para ella. Aquellas que superen ese peso sí requieren de seguro propio y están obligadas a superar la ITV cada cierto tiempo. La primera inspección será a los 6 años y después deberá superar sucesivas revisiones cada dos, además de necesitar su propia matrícula roja.
¿Sois una familia numerosa?
El segmento de las caravanas se divide en ambientes. Concretamente, existen vehículos con uno, dos o tres en función de las zonas que incluye en su interior. Las de uno son aquellas que tienen solo un salón/cocina que se convierte también en cama y que acogen a dos personas adultas, como mucho con un bebé. Las de dos suelen incorporar un par de literas para los niños, además del baño y una cocina de dimensiones más holgadas. Normalmente, el comedor se convierte a su vez en la cama de matrimonio.
Finalmente, las caravanas de tres ambientes son las más grandes, y también las más complicadas de transportar. Su peso es notable y será necesario un coche potente para poder viajar de manera confortable, segura y tranquila. El habitáculo de estas caravanas está dividido en tres partes, con las zonas comunes marcadas e incluso pueden contar con dos puertas, una para la habitación de matrimonio y otra para la parte de los niños.
¿Ventajas de la caravana?
Las caravanas son las aliadas de las escapadas de fin de semana, acampadas a un camping o los viajes a un territorio concreto en verano. Existen familias que recorren Europa remolcando uno de estos vehículos pero sus ventajas residen, sobre todo, en la posibilidad de tener un hogar móvil. Además, son bastante más económicas que una autocaravana e incluso que un camper.
Si te mueves con una caravana a cuestas deberás ir a parar, sin excepción, a un camping. La acampada está prohibida en nuestro país. No cuentan con el limbo legal de los campers y autocaravanas, legisladas como vehículos y que pueden pernoctar donde quieran, siempre y cuando estén bien estacionados.
A cambio, puedes dejarla a buen recaudo en unas instalaciones ideadas para ellas. Los campings españoles son reconocidos en el resto de Europa por su calidad en el servicio, entorno privilegiado y seguridad. Entre sus calles podrás desconectar, olvidar los horarios de oficina y acercarte a la playa, en caso de estar en la costa, o pasear por el bosque, si se opta por un destino de montaña. Además, tus hijos tendrán contacto con otros niños que, de otro modo, nunca habrían conocido. Un aspecto esencial para su crecimiento.