Con unas ventas disparadas y una demanda que supera con creces la oferta, el uso de la bici como medio de transporte, además de como práctica deportiva, está viviendo un boom sin precedentes. La presencia de bicicletas en las ciudades es cada vez más habitual, ya sean de alquiler o de propiedad. Sin embargo, su uso no está exento de riesgos. En este sentido, según datos aportados por la DGT, en 2020 perdieron la vida en España 36 ciclistas, 13 de los cuales no llevaban casco. A pesar de que el número de muertos con respecto a 2019 se redujo en 4 personas, esta cifra de fallecidos que circulaba sin casco supone el 36% del total. Y aunque las víctimas mortales han bajado considerablemente con respecto a 2012, cuando perecieron 72 ciclistas y el 72% de los accidentes ocurrieron en vías urbanas, el uso del casco es la mejor solución para evitar esas muertes.
No es ningún secreto que este accesorio aporta un plus de seguridad, ya que protege contra el riesgo de lesiones en la cabeza hasta en un 85 por ciento, y de lesiones en el cerebro hasta en un 88 por ciento, según la Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las Carreteras. Su obligatoriedad para motoristas no deja lugar a dudas, pero en la bicicleta, por desgracia, todavía hay usuarios reticentes a usarlo.
¿Qué dice la ley?
A día de hoy, el casco es obligatorio en vías urbanas e interurbanas solamente para los menores de 16 años. En el caso de los adultos, solo es obligatorio al circular por vías interurbanas, por lo que se les permite prescindir de este accesorio por ciudad. Igualmente, en subidas muy pronunciadas y prolongadas y por causas médicas acreditadas mediante certificado médico o en condiciones de calor extremo, los ciclistas pueden circular sin él.
Atendiendo al sentido común y a los informes de marcas y asociaciones sobre los niveles de protección craneal y cerebral del casco, el uso del mismo debería ser obligatorio en todo tipo de situaciones. Un hábito ineludible previo a montar en bici. Al fin y al cabo, es la mejor protección que un ciclista puede tener en caso de sufrir un accidente.
En este sentido, los fabricantes desarrollan cascos cada vez más seguros, tanto frente a impactos como en cuanto a seguridad pasiva, haciéndolos más visibles ante el resto de usuarios de la vía pública. A continuación presentamos 5 cascos muy seguros para uso en ciudad que aplican tecnologías y soluciones de vanguardia para ofrecer la máxima protección a los ciclistas.
Bontrager Charge WaveCel
Es el primer casco urbano que adopta la tecnología WaveCel, una estructura de celdas retráctiles que cubre el interior y que ha sido destacada por la revista Time como uno de los 100 mejores inventos de 2020. Su particularidad es que en caso de impacto absorbe la energía del mismo antes de alcanzar la cabeza, siendo hasta 5 veces más eficaz en la prevención de sufrir lesiones cerebrales que los cascos convencionales con espuma EPS.
El Bontrager Charge WaveCel ha obtenido la máxima puntuación en los tests de seguridad del prestigioso centro de pruebas Virginia Tech y está homologado para su uso con Speed Bikes. Presenta un sistema de ajuste mediante dial giratorio BOA, una práctica hebilla magnética y cuenta con un soporte posterior para instalar una luz (no incluida). Se ofrece en tres colores (negro, azul y amarillo flúor) y en tres tallas: S (51-57 cm), M (54-60 cm) y L (58-63 cm). Pesa 428 gramos en talla mediana, una cifra algo superior al resto, y cuesta 149,99 euros.
Endura Luminite
El casco urbano Luminite del fabricante escocés Endura sobresale por su alta visibilidad, una cualidad que en el entorno urbano cobra una importancia máxima. Además de sus amplias inserciones reflectantes en la parte posterior, este casco incorpora una luz LED trasera. Se carga mediante un puerto USB y ofrece tres modalidades de iluminación. En cuanto al diseño, es compacto, de estilo casual y ofrece una buena ventilación. Otro de sus puntos distintivos es su visor extraíble, que emula la forma de una gorra de ciclismo. Como ocurre con el Bontrager, está cubierto por una garantía de la marca en caso de accidente. Este modelo de Endura está disponible en tres tallas (S-M, M-L y L-XL) y en tres acabados: negro, azul y amarillo flúor. Su ajustado precio es otro de sus principales argumentos: 84,99 euros.
Giro Cormick MIPS
De dimensiones compactas y bien ventilado gracias a sus 18 aberturas, este casco del fabricante californiano Giro sobresale por su polivalencia. En este sentido, para facilitar su uso, llega en una talla única (54-61 cm). Está fabricado siguiendo una construcción In-Mold, la más avanzada y presente en los cascos mejor ventilados. Presenta un curioso sistema de ajuste mediante un cordón elástico flexible (Cord Loc Fit System) y, como el SCOTT, equipa la tecnología sueca de protección cerebral MIPS, que aporta un extra de seguridad. Viene de serie con una visera blanda extraíble y con un clip trasero que permite montar una luz (no incluida). Igual que el resto de modelos presentados en este artículo, es unisex. El casco Giro Cormick MIPS se comercializa online en color negro mate, gris mate y amarillo flúor.
POC Omne Eternal
A pesar de su estética más o menos tradicional, este casco urbano es revolucionario. POC, fabricante reconocido mundialmente por su investigación y preocupación por la seguridad, ha unido esfuerzos con otra compañía sueca, Exeger, para incorporar en este casco un material disruptivo: Powerfoyle. Se trata de un innovador material capaz de captar luz, interior o exterior, y convertirla en energía eléctrica. Y esto lo lleva a cabo sin necesidad de ningún interruptor. Es por ello que el POC Omne Eternal logra que su luz trasera funcione con solo ponerse el casco de forma automática y mediomabientalmente sostenible. En cuanto a seguridad, el casco cumple con todos los estándares y presenta una carcasa de policarbonato y espuma EPS. Además, incorpora las almohadillas de silicona inyectada SPIN que, como otras tecnologías como MIPS o WaveCel, protegen el cerebro ante los impactos angulares. Este casco llegará en junio en un único color (negro mate) y a un precio de 250 euros.
SCOTT Il Doppio Plus
Con una estética minimalista y elegante, este casco presenta una cobertura ampliada en la parte posterior. Asimismo, incorpora la reconocida tecnología sueca MIPS (acrónimo de sistema de protección de impactos multidireccional, en español), que reduce las fuerzas rotacionales en el cerebro ante los impactos en ángulo, los más frecuentes en marcha. Así pues, este casco no solo protege el cráneo, sino también el cerebro gracias a la tecnología MIPS. En cuanto a visibilidad, también está muy bien dotado. En primer lugar, porque incorpora una luz trasera intermitente con dos modos de funcionamiento. Y, en segundo lugar, porque la versión en color gris oscuro es reflectante. El SCOTT Il Doppio Plus también se comercializa en color blanco y negro, y tiene un peso de 350 gramos. Consta de solo dos aberturas frontales de aire y la gama consta de tres tallas: S (51-55 cm), M (55-59 cm) y L (59-61 cm). Tiene un precio de venta recomendado de 119,95 euros.