Por qué es perjudicial para el coche la sal que derrite la nieve en la carretera
Por motivos de seguridad vial, la DGT aconseja evitar conducir cuando hace mal tiempo, como estos días, en los que el temporal 'Filomena' está azotando gran parte del país
Iniciamos el 2021 con unas temperaturas muy bajas y un temporal de nieve que según la Dirección General de Tráfico (DGT) está afectando a 280 carreteras de la red nacional. La borrasca Filomena, nombre que ha dado Aemet (Agencia Estatal de Meteorología) al primer gran temporal de invierno del año, está dejando copiosas nevadas en buena parte del país.
En su cuenta de Twitter, la DGT ha aconsejado no coger el coche estos días y en caso de tener que hacerlo, consultar antes el pronóstico meteorológico y el estado de las carreteras (aquí te explicamos cómo interpretar la información de tráfico asociada a estas condiciones).
La conducción sobre nieve es peligrosa porque los neumáticos reducen su capacidad de tracción y patinan. Esto puede acabar provocando la pérdida de control del coche, lo que incrementa el riesgo de sufrir un accidente de tráfico.
En este tipo de situaciones se suele utilizar sal para que se derrita más rápidamente la nieve de las carreteras y así disminuya el riesgo. Pero, ¿por qué se utiliza este producto? Xavier Giménez, Profesor de Química Ambiental en la Universidad de Barcelona, explica que cuando esparcimos la sal sobre la nieve o el hielo que se ha depositado en el asfalto tiene lugar un fenómeno llamado descenso crioscópico que consiste en hacer descender el punto de congelación del agua. Esto significa que, si con la presión atmosférica normal el agua se congela a 0ºC, si la mezclamos con sal esta temperatura irá bajando y, en función de la cantidad de sal que tiremos, puede llegar a descender hasta los -21 ºC.
El paso de los vehículos por la carretera garantizará que esas dos sustancias se mezclen correctamente y el proceso se realice de forma adecuada. No obstante, Xavier destaca que “la utilización de la sal favorece la corrosión de las partes metálicas de los coches, especialmente en las partes inferiores. Este fenómeno también tiene lugar con aquellos vehículos que circulan o están cerca del mar ya que quedan rociados por el espray marino, unas gotas de sal que flotan en el aire y que también aceleran la corrosión”.
El dato
La utilización de la sal en la carretera favorece la corrosión de las partes metálicas de los coches
Para evitar que esto suceda, Istobal, expertos en el lavado y cuidado de vehículos, aconsejan limpiar regularmente el coche en época de nevadas para eliminar la sal incrustada y evitar sus efectos corrosivos, que pueden provocar daños en la pintura, la carrocería y las llantas de los vehículos. Además, advierten que también puede producir una mayor oxidación en otras partes del coche como amortiguadores, tubo de escape, frenos y radiador. Por este motivo, recomiendan no dejar pasar más de una semana para limpiar bien el vehículo tras haber circulado por carreteras donde se haya vertido sal.
Asimismo, apuntar que en invierno, no solo la sal, también la nieve y el barro, y la suciedad que esto conlleva, pueden dificultar la visión y comprometer la seguridad vial. Istobal recomienda hacer uso de programas de lavado con altas presiones o espumas para ayudar a disolver la sal. No te olvides de revisar y limpiar bien los bajos de carrocería, además de las llantas, ya que son zonas donde se acumula mucha sal incrustada, y de realizar el secado ya que en esta época del año es más fácil que se forme hielo a partir de los restos de agua que quedan en el vehículo. Otro consejo es utilizar ceras para proteger la pintura del vehículo, ya que depositan una película protectora sobre la carrocería que incluso ayuda a mantener limpio el vehículo durante más tiempo.
El dato
Circular sin cadenas de nieve cuando es obligatorio puede conllevar una multa de 200 euros
Sea como sea, recuerda que si tienes que circular por zonas donde haya presencia de nieve o hielo tendrás que calzar los neumáticos del coche con las cadenas adecuadas. Y sobre todo asegúrate que sabes montarlas (aquí te explicamos cómo). Circular sin ellas cuando es obligatorio puede conllevar una multa de 200 euros. También puedes montar neumáticos de invierno, en España son una alternativa legal a las cadenas, según marca el Reglamento General de Vehículos, basado en el Real Decreto 2822/1998.
Aquí te dejamos con una lista sobre las principales recomendaciones que debes tener en cuenta si te ves obligado a conducir bajo estas condiciones meteorológicas.
CONDUCIR CON NIEVE