Una señal de tráfico es un “elemento, signo o marca destinado a advertir u ordenar la circulación”. Así es como el Diccionario panhispánico del español jurídico, de la Real Academia Española, define este importante aspecto del sistema de regulación vial. En nuestro país, el Reglamento General de Circulación incluye más de 400 señales de tráfico y marcas viales que, en teoría, todos los conductores deben conocer y respetar para garantizar la seguridad en las carreteras.
Además de las señalas que incluye el Reglamento General de Circulación, es importante estar atentos a otras indicaciones que nos podemos encontrar al volante. Son las señales que los Ayuntamientos pueden generar de manera exclusiva para ordenar el tráfico en sus ciudades, una facultad avalada por el Tribunal Constitucional el año pasado tras una sentencia anterior adoptada por el Tribunal Supremo.
Por esta razón, es necesario que los conductores estén familiarizados tanto con las señales estándar que recoge la normativa a nivel nacional como por las señales específicas de cada municipio. Estas señales locales pueden variar en su diseño y significado según las necesidades particulares de cada Ayuntamiento, pero algunas de ellas son comunes en distintas localidades.
Los Ayuntamientos pueden generar señales exclusivas para ordenar el tráfico en sus ciudades
En algunas ciudades se están implementando nuevas señales viales que se pintan sobre el asfalto. Una de estas señales consiste en una marca vial cuadrada de color amarillo con una aspa en su interior. La señal suele causar cierta confusión con los conductores, ya que por norma general no se ha proporcionado una explicación sobre su significado y su función en la regulación del tráfico. Y tampoco se aprende en las autoescuelas.
El significado de esta señal que recuerda a pequeña escala las cuadrículas de marcas amarillas pintadas sobre la intersección de dos vías tiene relación con las bocas de incendios. Señala el punto exacto bajo el cual se encuentran los hidratantes o bocas de incendios con la finalidad de que, en caso de emergencia, los equipos de bomberos los puedan localizar rápidamente desde el propio camión.
La facultad que tienen los consistorios para diseñar sus propias señales está avalada por el Tribunal Constitucional
Se trata, sin duda, de una medida de seguridad de vital importancia para optimizar la respuesta en situaciones de emergencia. De este modo los bomberos pueden acceder de manera más eficiente a los recursos hídricos necesarios para conectar sus mangueras y combatir los incendios con mayor rapidez. Los bomberos también utilizan estas bocas de agua para llenar sus camiones cisterna.
El hecho de que los Ayuntamientos puedan diseñar señales de tráfico propias que no estén incluidas en la legislación está avalado por el Tribuna Constitucional. El máximo tribunal emitió un fallo en este sentido sobre un recurso de amparo presentado por la asociación de defensa de los conductores Automovilistas Europeos Asociados (AEA) contra una sentencia del Tribunal Supremo.
El caso tenía su origen en 2014 cuando AEA presentó un recurso contra el Ayuntamiento de Madrid por modificar la Ordenanza de Movilidad para autorizar la señalización de plazas de estacionamiento con marcas viales de colores (verde, azul discontinuo y naranja) que no existen en el Catálogo Oficial de Señales del Reglamento de Circulación.
AEA ya advirtió entonces sobre el peligro que constituye para los conductores la posibilidad de que los Ayuntamientos puedan generar sus propias señales de tráfico. Más teniendo en cuenta que en España hay más de 8.000 consistorios.