El exceso de velocidad es la infracción que más cometen los conductores españoles. Cada año, dos de cada tres multas que impone la Dirección General de Tráfico (DGT) en las carreteras de su competencia están relacionadas con la velocidad inadecuada, que es de largo la sanción que reporta mayor recaudación a las arcas del organismo. Esta situación no es ajena al resto de países comunitarios donde el acto de pisar el acelerador más allá de lo permitido también representa la infracción más frecuente.
Bélgica no es una excepción, y en los últimos años, además, este tipo de infracción registra una tendencia al alza. Hace unos meses, la justicia belga informó de un aumento notable del número de multas por exceso de velocidad. Según datos recogidos por el diario La Dernier Heure, las infracciones de velocidad pasaron de 4,9 millones en 2021 a 6,2 millones en 2022. Estas cifras suponen un aumento del 27% en solo un año.
Recientemente, las autoridades belgas desvelaron a los medios los registros de velocidad más elevados que consignaron los radares instalados en las carreteras interurbanas del país. El récord fue para un conductor que fue cazado a 413 km/h por una autopista en la que el límite es de 120 km/h.
El suceso tuvo lugar en una carretera de la región de Flandes y hasta el momento no ha trascendido la identidad del infractor ni el modelo del automóvil que conducía. Sin embargo, medios belgas sugieren que se trata de un Bugatti Chiron, un superdeportivo de lujo que puede llegar a alcanzar los 490 km/h. Este coche tiene un valor en el mercado de 2,4 millones de euros y está reservado a los bolsillos más adinerados.
No ha trascendido el vehículo que conducía, pero los medios apuntan que se trata de un Bugatti Chiron valorado en 2,4 millones de euros
Si bien la cámara que cazó al vehículo registró una velocidad de 413 km/h, el conductor fue denunciado por circular a una velocidad de 388 km/h, tras haberle sido aplicado el margen de error del 6% para determinar la sanción correspondiente. Sin embargo, el automovilista podría quedar impune por triplicar la velocidad máxima permitida debido a un resquicio legal.
Según informa TF1, los radares desplegados por las carreteras belgas están preparados para registrar con precisión velocidades máximas de 250 km/h o 300 km/h. Cualquier cifra por encima de estos dígitos, no cuenta con respaldo legal de acuerdo a la calibración de los aparatos. Precisamente, este es el argumento que utiliza el infractor para defenderse y no tener que hacer frente a una multa de 4.000 euros. La infracción también conlleva la retirada del carnet por un periodo que va de los 8 días a los 5 años.
El último año las infracciones por exceso de velocidad aumentaron en Bélgica un 27%
El incidente ha generado un gran revuelo en la opinión pública, despertando tanto la curiosidad de los ciudadanos como su preocupación por la seguridad vial y el cumplimiento de las normas de tráfico. A medida que las autoridades continúan investigando el suceso, se espera que se revelen más detalles sobre la identidad del conductor y las posibles consecuencias legales a las que se enfrentará.
La ‘hazaña’ de este conductor ha dejado en un segundo plano los otros dos registros más altos que el año pasado consignaron los radares de las carreteras de Bélgica. Un automovilista fue fotografiado por un cinemómetro conduciendo a una velocidad de 247 km/h por una autopista y otro coche fue cazado circulando a 169 k/h por una zona donde el límite de velocidad es de 50 km/h.
Multas progresivas
En determinados países de la Unión Europea, como Finlandia, Suecia y Dinamarca, así como en otros estados europeos, como Suiza y el Reino Unido, las sanciones de tráfico que imponen las autoridades guardan relación con el nivel económico de los infractores. Por esta razón, un conductor acaudalado de Finlandia fue multado el pasado mes con 121.000 euros por exceso de velocidad.
Según publicó Nya Aland, el principal diario de las Islas Aland, el multimillonario Andreas Wicklöf conducía a 82 km/h por una carretera en dirección a Mariehamm donde el límite es de 50 km/h. Además de recibir la multa económica, el acaudalado ciudadano finlandés fue sancionado con la pérdida de 4 puntos del carnet.