El truco del maniquí para circular por el carril VAO te costará 200 euros
Algunos conductores pícaros han simulado llevar a más ocupantes para poder utilizar estas vías
Primer lunes de septiembre. Tras las vacaciones veraniegas, todo comienza a volver a la rutina. Y el tráfico en las ciudades también, aunque la verdadera normalidad se pondrá de manifiesto en unos días, cuando se inicie el curso escolar y la circulación a primera hora de la mañana vuelva a ser una odisea para quienes van al trabajo en coche o llevan a sus hijos al colegio en este medio de transporte.
Con el objetivo de descongestionar las vías de acceso en algunas grandes urbes españolas existe el carril Bus-VAO (Vehículo de Alta Ocupación), cuyo sentido de circulación, horario de uso y mínimo de pasajeros requerido por vehículo puede ser variable. Para poder utilizarlo lo habitual es que en el coche deban viajar al menos dos ocupantes. Esto obliga al conductor a ir acompañado.
Sin embargo, algunos automovilistas solitarios han recurrido al ingenio para intentar sortear los controles. Una de las soluciones utilizadas es la de colocar un maniquí adecuadamente arreglado en alguna de las plazas del automóvil. De todos modos, este truco no siempre surte efecto. Y es que normalmente la inmovilidad del muñeco acostumbra a levantar las sospechas de los agentes.
Esto es lo que sucedió este mismo verano a la conductora de un Volkswagen Polo que circulaba por el carril VAO de la A6, en dirección Madrid. La mujer llevaba en la parte trasera un maniquí perfectamente caracterizado, con una peluca y la cabeza orientada hacia el interior. Su obvia rigidez alertó a la patrulla de la Guardia Civil que estaba realizando labores de vigilancia en el kilómetro 17.200 de la citada vía. Esta infracción le supuso una multa de 200 euros.
Este no es el único caso de personas que recurren a la picaresca para simular que van más ocupantes de los que en realidad viajan. Ya hemos visto anteriormente a otros conductores que han recurrido a trucos similares. Uno de ellos, salió a la luz pública en 2016. El infractor cometió varios errores que hicieron saltar las alarmas a los agentes: en primer lugar, llevaba en el asiento del copiloto el maniquí de un niño pequeño (la normativa lo prohíbe); y, en segundo lugar, lo llevaba abrigado con una chaqueta polar en pleno mes de junio.
En circunstancias concretas, la normativa permite circular por el carril Bus-VAO a vehículos con un único ocupante a bordo. Tal y como explica el RACE, pueden utilizarlo quienes se pongan al volante de ejemplares “con la señal V-15 de movilidad reducida, sean titulares de un permiso de conducción con alguna limitación física acreditada (debe figurar en el código 200 y llevar anexada una autorización de la Jefatura Provincial de Tráfico), motocicletas de dos o tres ruedas, autobuses de más de 3.500 kg de MMA, vehículos con etiqueta CERO emisiones de la DGT, taxis y vehículos de carsharing. Estos últimos vehículos deberán llevar el distintivo, que le identifica como coche compartido, pegado en el ángulo superior izquierdo del parabrisas.”
Puntualmente, también pueden circular los clasificados como ECO, C o B. Lo podrán hacer cuando se indique específicamente en los paneles de mensaje variable de acceso a los carriles VAO. Estos vehículos deberán exhibir el correspondiente adhesivo en un lugar visible, preferiblemente en el ángulo inferior derecho del parabrisas.
El apartado a) del artículo 35.2 del Reglamento General de Circulación establece que “la utilización del carril habilitado para VAO queda limitada a motocicletas, turismos y vehículos mixtos adaptables, y está prohibida, por tanto, al resto de vehículos y conjuntos de vehículos, incluidos los turismos con remolque, así como a peatones, ciclos, ciclomotores, vehículos de tracción animal y animales”. También pueden utilizarlo los vehículos de policía, extinción de incendios, protección civil y salvamento y asistencia sanitaria en servicio de urgencia, así como los equipos de mantenimiento de las instalaciones y de la infraestructura de la vía.