Rescatan a un bebé alce del ataque de un oso y diez años después sigue visitándoles cada día
Familia especial
La historia ha generado mucho debate por la intervención humana cuando el oso se iba a alimentar del animal rescatado
El alce antes y después del rescate
Conduciendo pueden ocurrir incidentes con animales como que un jabalí o un ciervo se crucen en medio de la carretera o encontrarse un perro abandonado que necesita ayuda. Sin embargo, lo que les ocurrió a estos viajeros es digno de película.
Estaban en plena carretera cuando vieron una escena en una zona boscosa absolutamente impactante: un oso se estaba llevando un bebé alce mordiéndolo del cuello y estaba a punto de devorarlo, pero justo en ese momento apareció la familia salvadora.
Recogieron al animal herido y se lo llevaron a casa para cuidarlo y que se recuperase. Poco a poco el pequeño alce fue mejorando su estado físico gracias a los cuidados de la familia y creció mucho en tamaño hasta convertirse en todo un adulto.
Al tiempo, la familia decidió soltarlo de nuevo en libertad y que viviera en el bosque como hacía antes del episodio que marcaría su vida. Con una despedida muy emotiva entre ambas partes, parecía que la historia conjunta había terminado.
Los cuidados de la familia sirvieron para que el alce creciese y fuese un adulto sano
No obstante, 10 años después de los hechos, el alce tiene la curiosa costumbre de venir a visitar a su familia salvadora a modo de saludo y dejando una emotiva escena cada vez que vuelve a su antigua casa.
Pese a esta bonita historia, la intervención humana en el proceso de alimentación del oso ha dado mucho que hablar y critican que “lo dejaron sin comida” y que han interrumpido “la cadena alimenticia” por un capricho personal.