Una ardilla llamada Mr.Peaches se ha convertido en la protagonista de una bonita historia. Descubierta huérfana en la terraza de la casa y sin posibilidades de sobrevivir al ser muy pequeña, la ardilla encontró rápidamente consuelo subiéndose a los vaqueros de Linda, su bondadosa salvadora. "No sé cómo puedo estar tan atada a esta ardilla", asegura.
Linda con Mr.Peaches
El día que la ardilla hizo su imprevista aparición, los hijos de Linda estaban en casa y su curiosidad y emoción eran evidentes. Incluso Jake, el perro de la familia, miró con curiosidad al pequeño animal.
Steve, la pareja de Linda, reconoció la necesidad de intervenir y ofreció su ayuda a la ardilla, que se hacía un ovillo utilizando su cola como manta. La familia se adaptó rápidamente a sus nuevas responsabilidades, atendiendo a las demandas de la ardilla: "Sabe cuando es el tiempo de jugar". Incluso empezaron a darle almendras sin cáscara debido a sus dientes poco desarrollados. Ahora incluso sabe donde esta su comida, así que solamente tiene que ir ahí y cogerla.
A medida que la ardilla crecía, la familia se dio cuenta de que su refugio, una cómoda con cajones de mimbre, era insuficiente. Aprovechando la afición de Mr.Peaches por los lugares altos, el padre de Linda construyó una hermosa pagoda, suspendida de un gancho, que servía de refugio a la ardilla. Allí ha construido una especie de nido.
Al parecer, esta ardilla suele ausentarse de vez en cuando de la casa familiar, pues sigue teniendo intactos sus instintos salvajes. Sin embargo, y pese que han pasado cuatro años desde que se la encontraran, siempre vuelve. "Me besa mucho, así que creo que sabe lo que es el amor", ha asegurado la mujer.
Esta conmovedora historia ha inspirado a Linda a escribir un libro, que ha tenido bastante éxito. "Es una historia muy dulce y me animaron a hacerlo, así que me senté y lo escribí", ha contado, asegurado que la ardilla le ha cambiado la vida. Además, ahora ha rescatado otras dos ardillas.
Este artículo se publicó en La Vanguardia el 16 de julio del 2023