A las puertas de presentar su desfile otoño/invierno 2025, Gucci ha anunciado este jueves la salida de su director creativo: Sabato de Sarno. Tan solo dos años ha mantenido el diseñador napolitano las riendas de la célebre casa italiana, que ahora se enfrenta a una nueva búsqueda de director creativo y un desfile en la semana de la moda de Milán presentado por su equipo de diseño.
“Cualquier proyecto importante depende de la pasión, la inteligencia y el corazón de personas extraordinarias. A ellos les digo: buscad siempre vuestra propia felicidad. Es la verdadera medida de si eres fiel a ti mismo, sea cual sea la oportunidad, sea cual sea el reto”, ha escrito el creativo en su cuenta oficial de Instagram para despedirse así del talento artesanal que lidera estos días la casa italiana. “Tal vez un gracias no sería suficiente. Pero hoy mi felicidad es para vosotros”, ha sentenciado.
Tal vez un gracias no sería suficiente. Pero hoy mi felicidad es para vosotros"
La firma, por su parte, ha difundido un comunicado en el que agradece a Sarno su trabajo en la casa así como el haber defendido las raíces de Gucci: “Me gustaría expresar mi profunda gratitud a Sabato por su pasión y dedicación en Gucci. Aprecio sinceramente cómo ha defendido la artesanía y la herencia de Gucci con tanto empeño”, ha reconocido en nota de prensa el CEO de Gucci, Stefano Cantino.
Sarno dio sus primeros pasos en la liga de grandes marcas de lujo en 2005 al entrar en Prada. El creativo también pasó por el atelier de Dolce & Gabbana y en 2009 llegó a la casa Valentino, donde adoptó por primera vez el título de directo creativo y desarrolló gran parte de su carrera.
Gucci, bajo la nueva dirección de Sabato De Sarno, proponía un armario más ponible y terranal.
Este nuevo salto directivo se suma a los que vienen sucediéndose en los últimos años en la mayoría de casas de moda. Entre los más destacados, John Galliano fue sustituido por Glenn Martens tras pasar una década moldeando Maison Margiela y el belga Matthieu Blazy asumió a principios de este año la dirección creativa de Chanel, sin caudillo oficial desde junio tras la repentina marcha de Virgine Viard. El movimiento de este creativo, a quien Bottega Venetta le debe su lavado de cara, obligó a la firma italiana a reclutar a la británica Louise Trotter.
Otro movimiento interesante lo ha protagonizado Sarah Burton, que asumió en septiembre la dirección creativa de Givenchy, como también Michael Rider, a cargo de Celine a propósito de la salida de Hedi Slimane – responsable de borrar el acento a la firma y dotarla de nuevas líneas– y Julian Klausner ascendiendo al despacho directivo de Dries Van Noten, después de que su fundador homónimo se retirara para dejar paso, en sus palabras, a “una nueva generación”.
