¿Quién no ha sentido nunca aquel cosquilleo en el estómago que, si no se calma pronto, se convierte en malhumor? Cuando tenemos hambre o han pasado horas desde la última vez que comimos algo, la mayoría de nosotros nos volvemos más irritables, impacientes e, incluso, nos podemos enfadar.
Pero, ¿por qué nos pasa esto? ¿Es normal que nos irritamos cuando tenemos hambre o no? ¿Es solo una excusa o hay una explicación científica detrás de este fenómeno? Según el farmacéutico Álvaro Fernández, eso tiene una explicación científica y ha publicado un vídeo en TikTok para revelarnos los diferentes motivos.

Álvaro Fernández, farmacéutico: “Es normal enfadarse cuando tenemos hambre”.
¿Por qué nos ponemos de malhumor cuando tenemos hambre?
Tener hambre puede afectar a nuestro estado de ánimo, pero esto tiene una explicación científica. “Si alguna vez has sentido que con hambre todo te irrita más, tranquilo, no eres solo tú, es ciencia (...) Si has tenido un enfado absurdo y después te has dado cuenta de que solo era hambre, ahora ya sabes que no es una excusa”, ha escrito el usuario @farmaceuticofernandez en su cuenta de TikTok.
El farmacéutico y creador de contenido Álvaro Fernández comparte muchos vídeos para explicar varios fenómenos bastante curiosos. “Cuando no comemos, disminuye el nivel de glucosa en la sangre y eso afecta la parte del cerebro que controla las emociones. También aumenta el cortisol y, en consecuencia, la irritabilidad”, ha explicado en este caso.
“Lo tengo bautizado desde hace años como ira gástrica”, “Yo quiero saber si es normal estar triste después de comer dulce”, “Tener hambre y sueño es horrible”, “Confirmo, yo me pongo de muy mala leche cuando estoy hambrienta”, “Siempre llevo algo en el bolsillo para engañar al estómago” o “Ahora lo entiendo todo”, son algunos de los comentarios en las redes.
¿Cómo podemos evitar que nos pase esto?
Para evitar el malhumor por culpa del hambre, hay que seguir varios hábitos que nos harán afrontar el día de una mejor manera y evitaremos perder los nervios: comer regularmente y alimentos ricos en proteínas, hidratarse, llevar snacks saludables a mano, evitar los azúcares refinados, etc.