Seis meses después de que el Gobierno anulara 33 títulos nobiliarios vinculados al franquismo, la Diputación de la Grandeza y Títulos del Reino ha expuesto al Rey, en una audiencia en la Zarzuela, su incomodidad por lo que María Cristina de Ulloa, duquesa de Arcos y presidenta de la entidad, calificó de ataques que reciben por parte de sectores sociales y formaciones políticas radicales debido al “revisionismo indiscriminado del que la historia de España está siendo objeto”.
Desde su proclamación, en junio de 2014, Felipe VI no ha hecho uso de su facultad de conceder nuevos títulos de nobleza, un asunto, que preocupa a la cúpula de la Diputación de la Grandeza que desean desvincular su imagen a la de una aristocracia pasada de moda. El rey Juan Carlos concedió 54 títulos en 38 años, reconociendo los méritos de artistas, científicos, políticos y empresarios entre ellos Salvador Dalí, Josep Tarradellas, Juan Antonio Samaranch, José Manuel Lara, Mario Vargas Llosa y Vicente del Bosque.
La audiencia, que se enmarca en los periódicos contactos que el Rey mantiene con diferentes entidades se produce seis meses después de que, en aplicación de la Ley de Memoria Histórica, se anularan 33 títulos vinculados al franquismo, de los cuales cinco fueron concedidos por el rey Juan Carlos. La Diputación de la Grandeza, que que agrupa a los ochocientos títulos nobiliarios que ostentan otras tantas personas en España, algunos con varios siglos de antigüedad, ha manifestado en repetidas ocasiones su malestar por esta medida que dejó sin títulos, entre otros, a Carmen Martínez-Bordiu, duquesa de Franco.
Adiós a la exaltación del franquismo
La aplicación de la Ley de Memoria Histórica, que entró en vigor el 22 de octubre de 2022, permitió anular los títulos que suponían una exaltación del franquismo. La mayoría fueron concedidos por Franco, quien se otorgó una potestad propia de la Corona, y cinco, fueron concedidos por el rey Juan Carlos, al inicio de su reinado, en los que se distinguían a la viuda y la hija de Franco, al presidente del Gobierno, Carlos Arias Navarro y al presidente de la Cortes, Alejandro Rodríguez de Valcárcel. Todos han sido anulados y los actuales titulares ya no podrán usar la distinción nobiliaria.
En los títulos anulados, habrá seis ducados (de Calvo Sotelo, de Carrero Blanco, de Franco, de Primo de Rivera y de Mola), 13 marquesados (de Alborán, de Arias Navarro, de Bilbao Eguía, de Casa Cervera, de Dávila, de Kindelán, de Queipo de Llano, de Saliquet, de San Leonardo de Yagüe, de Somosierra, de Suanzes, de Varela de San Fernando y de Vigón), 12 condados (de Alcázar de Toledo, de Bau, de Benjumea, de la Cierva, del Castillo de la Mota, de Fenosa, de Iturmendi, de Jarama, de Labajos, de Martín Moreno, de Pallasar y de Rodríguez de Valcárcel), el señorío de Meirás y, finalmente, dos grandezas de España (a Fernando Suárez de Tangil y de Angulo y al conde de Rodezno).