El presidente de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, trata de recuperar la iniciativa política tras unas semanas de perfil bajo en eventos y en su relación con los medios de comunicación. En apenas unos días, el mandatario popular ha logrado encarrilar los Presupuestos de 2025 con el inestimable apoyo de Vox, que ha aplaudido el propio Feijóo; se ha reunido, por primera vez, con familiares de dos víctimas mortales; ha presentado el diagnóstico de los daños ocasionados por la dana, en la persona de su vicepresidente Gan Pampols y, también por primera vez, ha pedido a Pedro Sánchez para colaborar en la fase de reconstrucción: “no podemos hacerlo solos”, dijo ayer.
No ha sido este el tono que ha mantenido durante largo tiempo, muy condicionado por los autos demoledores de la jueza de Catarroja que investiga la tragedia y que ya ha citado como investigados a la exconsellera Salomé Pradas y a su número dos, Emilio Argüeso, para el próximo 11 de abril. En estos autos, la instructora apunta a que había suficiente información para avisar a la población y no se hizo a tiempo. Las peticiones de dimisión se han sucedido a partir de estos escritos, incluso desde medios de comunicación conservadores nacionales.
Durante este tiempo, Mazón había eludido estar presente incluso en los actos de las fallas de Valencia, excepto en la Cremà, donde apareció por sorpresa. Y ha evitado convocar a la prensa para dar respuesta a todas las cuestiones que plantea la instructora. Incluso ha sido difícil conocer día a día su agenda, en muchos casos divulgada horas antes de protagonizar algún evento como la presentación del preacuerdo con Vox que se ejecutó el pasado lunes por la mañana. Justamente, el pacto con Santiago Abascal ha sido lo que más se le ha criticado esta semana, pero su partido, e incluso el propio Feijóo lo han defendido públicamente.
El jueves, en un gesto sorpresa, Mazón recibía a familiares de dos víctimas mortales que se manifestaban frente al Palau. Estos salieron satisfechos del encuentro. Pero ha sido un gesto duramente criticado por una de las asociaciones de víctimas. Lo cierto es que este golpe de efecto se produjo antes de aprobar en el pleno del Consell las cuentas de 2025, aunque falta todavía el trámite parlamentario y hacer más cesiones a los ultras que ya han advertido que si no se accede a sus peticiones votarán en contra de las cuentas de 2025.
Ayer, el presidente valenciano volvía a tomar la iniciativa y, en la presentación del Informe de Diagnóstico del Plan de Recuperación Económica y Social, reclamó la cooperación del Gobierno de Pedro Sánchez. “Es un imperativo nacional”, justificó y apuntó: “No podemos hacerlo solos”. Mazón vuelve a intentar marcar la agenda aprovechando que la oposición parece encallada en el bucle de la moción de censura y la llamada a las urnas. PSPV y Compromís no se ponen de acuerdo en como actuar ante Mazón más allá de la crítica.