Los japoneses saben que viven en un territorio propenso a los terremotos. Y saben cómo deben reaccionar si se produce uno, porque reciben la educación necesaria y realizan frecuentes simulacros. ¿Por qué los valencianos que habitan en terrenos inundables no lo hacen e incluso a menudo ni siquiera son conscientes del riesgo? No está previsto. Y los expertos geógrafos que hoy han abierto la I Conferencia sobre Cambio Climático y Territorio en el Mediterráneo Ibérico creen que realizar simulacros sería imperativo para prevenir los efectos sobre la población en el caso de una riada como la que se produjo el pasado 29 de octubre.
Así lo ha expuesto el ponente Javier Martin Vide, catedrático emérito de Geografía Física de la Universidad de Barcelona, tras analizar las evidencias de que el cambio climático está extremando fenómenos como la temperatura del mar, las sequías, precipitaciones, incendios u olas de calor.
Los protocolos ante emergencias deben ser perfectamente conocidos por los responsables políticos encargados de su gestión y todos los agentes implicados
Junto al equipo que ha elaborado la ponencia, ha redactado un conjunto de recomendaciones que se elevarán a las instituciones públicas. Además de la realización de simulacros que aumenten la información y la conciencia del riesgo en la población, los expertos creen “imperativo garantizar a la población la atención y la ayuda rápida de las administraciones públicas (autonómicas y locales) ante las alertas emitidas por la AEMET, y los servicios hidrológicos, lo que requiere que los protocolos ante emergencias deban ser perfectamente conocidos por los responsables políticos encargados de su gestión y todos los agentes implicados”.
Para garantizar que las recomendaciones se cumplan, la Conferencia propone la creación de un Observatorio del Cambio Climático y los Riesgos Meteorológicos del Mediterráneo Español, con sede en la Comunidad Valenciana, pero que integre además, especialmente, a Catalunya, Baleares, Murcia y Andalucía.
Ante olas de calor, creen imprescindible la toma de medidas como la mejora del aislamiento térmico de las viviendas
Al respecto de las olas de calor, que según la ponencia son cada vez más frecuentes y peligrosas para la salud, creen imprescindible la toma de medidas como la mejora del aislamiento térmico de las viviendas y la acción de equipos sociosanitarios específicos que presten ayuda a los mayores. El profesor Martín Vide ha señalado que en los últimos veranos el Mediterráneo español está registrando hasta 100 noches tropicales y entre 20 y 25 noches tórridas que están aumentando la morbilidad y la mortalidad entre personas mayores y con problemas de salud, sobre todo entre aquellas que carecen de medios para contrarrestarlo.
Ante la subida constante del nivel del mar en nuestro litoral, que afectará progresivamente a las playas, deltas y costas bajas, los ponentes recomiendan “encarecidamente proponer al más alto nivel político que los plazos de concesión previstos en la Ley de Costas se actualicen con frecuencia, cada 10 años, a las nuevas realidades físicas y territoriales”.